Restos de Rodrigo Anfruns serían exhumados tras comprobarse que fue víctima de torturas

El informe forense que ordenó el ministro en visita Manuel Valderrama al departamento tanatológico de la Universidad de Chile por la muerte del menor de seis años de edad Rodrigo Anfruns en 1979, descartó que la data de muerte haya sido de once días como se estableció en su defunción y afirmó que una mancha en el torax del niño correspondía a torturas con el calor de un cigarrillo.

El documento dado a conocer a 32 años de su muerte, concluyó en la necesidad de exhumar los restos del pequeño, tras confirmarse que habría sido torturado antes de su deceso, como lo confirma la doctora Carmen Cerda y se suma a la propuesta el Consejo de Defensa del Estado, que es parte en la causa.

Los peritajes realizados en los últimos 20 años establecieron que el cadáver de Anfruns fue descubierto 3 días después de su muerte en un sitio eriazo colindante con la casa de sus abuelos en la comuna de Providencia y no once días como se estableció en un comienzo.

Por otra parte, el autor confeso del crimen, un menor de 16 años conocido por sus iniciales P.P.V, hoy, Patricio Pincheira Villanueva fue declarado sin decernimiento en ese entonces y el juez Ricardo Gálvez Blanco ordenó el cierre del caso en 1982.

La madre del pequeño asesinado, Paola Papi Beyer y el abogado Roberto Celedón confirmaron los antecedentes y estarían dispuestos a que se le practiquen nuevos exámenes al menor.

Celedón, a pesar de no querer revelar ninguna identidad, aseguró que las acusaciones se harán “con nombre y apellido”. “A partir de que se le exija asumir la responsabilidad a personas que han participado, sea como autor, o como encubridor; asuman la responsabilidad y que a partir de ahí nos permita develar quién secuestró y dónde estuvo el niño los 11 días de su desaparecimiento; y quienes estuvieron en la decisión del secuestro del niño y por qué lo hicieron”, explicó el abogado.

Para la madre del menor, con el estudio pericial se quema una etapa, y espera que ahora, ya demostrado que la data de muerte no pudo haber sido más de dos o tres días, “viene la siguiente pelea. Las personas que cubrieron esto, me imagino que tendrán algo que aportar, y espero por su propia conciencia que lo hagan”, declaró Papi.