Ultraderecha europea se fortalece gracias al rechazo a los políticos y a internet
Un estudio advierte de que se está "infravalorando" el hecho de que muchos jóvenes, que rechazan a los partidos políticos, se hayan adherido a grupos nacionalistas y contrarios a la inmigración conectados a través de la red.
La desilusión con los partidos políticos convencionales está impulsando en toda Europa una nueva generación de activistas de ultraderecha conectados a través de internet, según el instituto de investigación británico Demos.
En un estudio publicado hoy, este instituto advierte de que se está “infravalorando” el hecho de que muchos jóvenes, que rechazan a los partidos políticos, se hayan adherido a grupos nacionalistas y contrarios a la inmigración.
El estudio “La nueva cara del populismo digital” ha identificado una nueva generación de activistas de ultraderecha en 12 países europeos, tras entrevistar a 10 mil seguidores en internet de grupos que se caracterizan por su oposición a la inmigración y su arraigado nacionalismo.
Se trata de asociaciones u organizaciones vinculadas a partidos como el British National Party (Reino Unido), Bloc Idetitaire (Francia), Die Freiheit (Alemania), Lega Nord (Italia) y el Danish People’s Party (Dinamarca) que ven como su habitual número de seguidores está aumentando gracias a esta nueva ola de jóvenes decepcionados y conectados a través de internet.
El informe advierte de que el auge del populismo o la ultraderecha a lo largo de Europa no puede ser entendido sin tener en cuenta a estos “guerreros del teclado”, que representan una parte importante del nuevo panorama político.
El retrato elaborado por Demos destaca que estos nuevos activistas de ultraderecha, mayoritariamente hombres menores de 30 años, sufren un alto nivel de descontento con los partidos convencionales y las instituciones y el sistema judicial de sus países.
Según el estudio, el 14 % está en paro y tiene una gran confianza en los líderes de los grupos de ultraderecha, que son percibidos como “más honestos, carismáticos y francos”.
La encuesta revela además que estos jóvenes tienen una tendencia a la movilización mayor de lo habitual, tienen más probabilidades de votar que el resto y además sus mayores preocupaciones a la hora de hacerlo son la inmigración y el radicalismo islámico.