Alcalde de Ránquil teme cesantía tras incendio de planta Nueva Aldea
El edil señaló que si bien la empresa está haciendo un esfuerzo por no dejar a los trabajadores a su suerte, en el largo plazo se mantiene "el problema que va a ocurrir con la cesantía", lo que repercute en su municipalidad.
Luego de que la planta de paneles Nueva Aldea, de Celulosa Arauco, resultara destruida por uno de los incendios forestales que afectaron recientemente el sur de Chile, el alcalde de Ránquil, Carlos Garrido, sostuvo que éste hecho no solo acarrea perder áreas cultivables, también aumenta el desempleo en la región.
“No solamente está la pérdida de cosas materiales propiamente tal de los terrenos cultivables de la agricultura sino que está este drama de la gente que va a quedar sin trabajo, que es jefe de hogar ya que detrás de ellos hay una familia”, dijo.
El edil afirmó que Celulosa Arauco ya le informó sus intenciones de volver a construir la planta. Sin embargo, esto podría tomar hasta dos años.
“De la gente que trabajaba ( de su comuna) allí en forma directa, de los 28 trabajadores están reubicando a tres y los 25 restantes los están desvinculando. Si bien es cierto no aplicaron el artículo 159 que les permitía no pagar nada sino que les van a entregar un finiquito sin tope, les van a mantener una seguridad por salud por tres meses, van condonar las deuda que tenían con la empresa post terremoto, pero definitivamente sigue habiendo el problema que va a ocurrir con la cesantía y esa es una responsabilidad que se nos traspasa al municipio, que comprenderán es la piedra de tope”, indicó Garrido, en conversación con Radio ADN.
El alcalde explicó que “los trabajadores no pueden estar menos que conformes respecto de lo que está haciendo la empresa, porque pudiéndose haber desligado de toda responsabilidad y haber aplicado el 159, no lo están haciendo y yo creo que esa es parte de la responsabilidad social con sus trabajadores”.
Por otro lado, 133 personas perdieron su fuente laboral tras el cierre de empresas subcontratistas que prestaban servicios a la planta Nueva Aldea. Garrido expresó su confianza en que esas firmas desvinculen a su personal en las mismas condiciones que Celulosa Arauco.
