Un iPhone interrumpe concierto de Mahler de la Filarmónica de NY
Mientras transcurría el movimiento final de la novena sinfonía de Gustav Mahler, y en medio de la sutil vibración de las dos arpas, los violines, violas y violonchelos, y muy por encima del contrabajo, apareció una Marimba.
La tecnología no respeta nada. Al menos eso es lo que debe haber pensado el director de orquesta Alan Gilbert. Mientras transcurría el movimiento final de la novena sinfonía de Gustav Mahler, y en medio de la sutil vibración de las dos arpas, los violines, violas y violonchelos, y muy por encima del contrabajo, apareció una Marimba. Pero no se trataba de un instrumento de percusión, sino del ringtone característico de iPhone.
El ringtone sonó una vez, sonó dos…y la tercera, mientras los espectadores del Avery Fisher Hall, una de las salas del Lincoln Center de Nueva York, ya comenzaban a ponerse incómodos, Gilbert giró levemente la cabeza hacia la izquierda. Estaba molesto.
Además, el sonido le llegaba desde muy cerca: la primera fila. Pidió que cesara el sonido, pero no sucedió. Entonces decidió cortar por lo sano y detuvo la ejecución de la sinfonía hasta que pudo dejar de compartir el recital con la entrometida Marimba.