Gobierno y privados buscan salidas a la escasez hídrica en el norte
Desde transportar agua por vía marítima en contenedores hasta construir un ducto de 1.600 kilómetros de largo, son las opciones que se barajan para afrontar la escasez del vital elemento.
En la macrozona de la I y II Región hay actualmente un déficit de 928 millones de metros cúbicos de agua. Así se desprende de la información que maneja la Dirección General de Aguas. Y el escenario no mejora: hacia el 2025 la cifra llegará a los 1.602 millones de metros cúbicos. Algo similar se vive en la macrozona de la III y IV Región, donde el déficit supera los 873 millones de metros cúbicos.
Ante esta situación, tanto el Ejecutivo como iniciativas privadas están tratando de encontrar salidas que permitan paliar la sequía, tanto en el corto como en el largo plazo.
Entre las primeras, señala Diario Financiero, se considera como algo factible el transporte de agua desde Coyhaique hacia el norte. Si bien no se ha definido todavía qué empresas tomarán parte en tal iniciativa, fuentes del Ministerio de Minería señalan que el plan piloto debería desarrollarse a mediados de 2012.
El agua que se extraiga en el sur sería almacenada en contenedores, los que a su vez serían enviados por vía marítima hacia el norte. Xtsrata -socia de AngloAmerican en Collahuasi- y Endesa son algunas de las empresas eléctricas y mineras que tienen derechos de agua en la zona, por lo que alguna de ellas debería operar el sistema, aunque Waters of Patagonia, compañía que embotella agua de Campo de Hielo Sur, también estaría interesada en tomar parte en la inusual iniciativa.
Otra medida que se discute, más a largo plazo, es la de fabricar un ducto desde el Maule, o incluso desde la zona de Bio Bío, el que podría llegar hasta Arica. Felipe Martín, secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Riego, afirma que esta obra sería parte de una verdadera carretera hídrica que quiere desarrollar el gobierno. Añade que “este tubo nos permitiría trasladar entre 15 y 30 metros cúbicos por segundo”.
El proyecto presentado por la firma francesa Vinci en conjunto con Fundación Chile, podría tener hasta 1.600 kilómetros de extensión y no estará listo antes de 10 ó 15 años. Sólo a mediados de año comenzarán los estudios de factibilidad.