Iglesia que promueve la poligamia evalúa llegar a Chile
Se trata de la Iglesia Fundamentalista de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, cuyo fundador fue condenado a cadena perpetua por violación a una niña de 14 años y a otros 20 por intento de violación a una joven de 17 años.
Hace algunos días en un medio nacional aparecieron dos anuncios que no pasaron inadvertidos para los lectores. El primero decía “Jesucristo, Hijo Ahman”, y el segundo señalaba que esta era “la voluntad de Jesucristo”, y además que “ahora todos los pueblos de la Tierra conozcan mi santa voluntad (…) Arrepiéntanse, llénense ahora de humildad, todos los pueblos se humillarán completamente a medida que envío juicios completos”.
El anuncio fue firmado por Vaughan E. Taylor y Nathan C. Jessop, de la Iglesia Fundamentalista de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, que estaría evaluando instalarse en Chile, según informa La Segunda. La sede principal de esta iglesia está ubicada en Utah, y no se trata de la iglesia de los “mormones” (Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días).
En la publicación además se ofrece la posibilidad de comprar los textos que contienen las profecías que los inspiran, ya que estarían haciendo un “tanteo de terreno” para llegar a Chile en caso de tener una buena acogida.
Sin embargo, esta suerte de secta, que cuenta con más de 10 mil fieles, lo que no cuentan es que practican la poligamia, y su fundador, Warren S. Jeffs, fue condenado en agosto del año pasado por un tribunal de Texas a cadena perpetua por violación a una niña de 14 años y a otros 20 años por el intento de violación de otra joven de 17 años, a quienes quiso convertir en “esposas espirituales”.
Además, el creador de la iglesia fue cómplice de la violación de una adolescente a la que obligó a casarse con un primo de 19 años el año 2001. Razón por la que estuvo dos años prófugo y fue uno de los 10 criminales más buscados por el FBI.
Otros 18 miembros de la secta han sido condenados a penas de cárcel de entre 6 y 75 años, por violación, bigamia e incesto.
En 2005, Jeffs, construyó un “rancho”, donde vivieron unos 400 niños durante cuatro años. En el lugar, que era llamado como “el paraíso”, quienes vivían no podían salir ya que era “una burbuja de fe en la que se cumplían los designios de Dios”. Finalmente, la policía allanó el lugar y los liberó.
El Ministerio Secretaría General de la Presidencia manifestó que frente a la posible llegada de esta iglesia, “en Chile hay libertad de culto, siempre y cuando se respete el orden público, la moral y las buenas costumbres”.