El Che de los Gays: “El Movilh ha actuado con insistente sesgo corporativo nublado por las cámaras de la TV”

“Daniel Zamudio son los homosexuales que envió a fondear en las aguas de Valparaíso el homofóbico presidente Carlos Ibañez del Campo; la lesbiana Mónica Briones asesinada por un agente de la CNI en los años 80; los homosexuales calcinados en la discoteca Divine en los 90; las travestis golpeadas y asesinadas impunemente en las calles; los gays acechados a las fueras de las discos después del carrete; los homosexuales adultos que se exponen al chantaje y al asesinato por una noche de pasión; las madres y padres que deben ocultar su sexualidad diferente para educar a sus hijos”

Las palabras son de el El Che de los Gays, el activista homosexual que siguió el funeral de Daniel Zamudio, el joven homosexual que fue atacado por presuntos neonazis, por televisión “acompañando con mi apretado corazón”.

El periodista cree que la muerte del joven homosexual “ha generado un ‘sentido común’ en la sociedad chilena que rechaza la violencia y el castigo violento al diferente”, el que “no se expresa aún en las instituciones públicas, políticas y en los medios de comunicación”.

¿Cómo enfrentas la muerte de Daniel Zamudio? ¿Qué significado le das?

La muerte de Daniel Zamudio me provoca profunda indignación, rabia y dolor. Su cobarde y brutal asesinato es la confirmación más violenta de lo mucho que nos queda por avanzar en la construcción de una sociedad que valore y respete la libertad y la diferencia sexual. Daniel Zamudio somos todos nosotros. Daniel es parte de nuestra loca historia de lucha y discriminación social. La muerte de Zamudio es un urgente llamado de atención y nuestro mejor homenaje en su despedida será fortalecer a los movimientos sociales y luchar en contra de la homofobia, lesbofobia y transfobia.

¿Cómo calificarías la rección de la sociedad chilena?

La muerte de Daniel Zamudio ha generado un “sentido común” en la sociedad chilena que rechaza la violencia y el castigo violento al diferente. Ese “sentido común” no ha existido antes cuando la violencia afectó a una de las nuestras que es travesti prostibular, por ejemplo. Llama la atención y aquí surge el desafío de analizar las variables sociales, simbólicas y comunicaciones que permiten que Daniel Zamudio se transforme en un “mártir” y no otras u otros. Desgraciadamente, ese “sentido común” no se expresa aún en las instituciones públicas, políticas y en los medios de comunicación. La sociedad y los medios de comunicación dicen hoy defender la no discriminación, pero no señalan las responsabilidades políticas e ideológicas de los cómplices y promotores de la homofobia en Chile, entre ellos: Monseñor Jorge Medina; el presidente del oficialista partido Renovación Nacional, Carlos Larraín; el animador de la TV, Kike Morandé o el comentarista – sociólogo, Fernando Villegas. Todos ellos y los conservadores parlamentos de la UDI que rechazaron odiosamente el avance de la Ley Antidiscriminación, sumados al actuar de los líderes de iglesias católicas y evangélicas, tienen enorme responsabilidad en lo sucedido con Daniel Zamudio.

¿Cómo calificas la labor del Movilh respecto a Daniel Zamudio?

El Movilh ha actuado con insistente sesgo corporativo nublado por las cámaras de la TV. Los crímenes, las muertes y sus injustas víctimas de violencia homofóbica no deben ser coronas corporativas, sino la razón y causa de la lucha comunitaria que motive el accionar organizado de un movimiento social libertario, amplio, solidario e inclusivo.

¿Crees faltan organizaciones de representación y defensa de los derechos homosexuales existiría mayor justicia?

Existen más organizaciones de homosexuales, lesbianas y trans, pero no representan las hegemonías masculinas y mediáticas de grupos como el Movilh o Fundación Iguales. Existen muchos colectivos de trabajo político y cultural que no trabajan por una ley específica como sería el Acuerdo de Vida en Pareja AVP, sino que apuestan a mayores transformaciones simbólicas, políticas y culturales. Yo sospecho de las prácticas y políticas del movimiento LGTB hegemónico que mantiene el sistema, acomodándose tras pequeñas conquistas, pero no socavando sus estructura normativas y neoliberales. Sospecho de la instalación de pequeñas banderitas del arcoiris cuando no se levantan mayores banderas de la transformación social, política, sexual y cultural.

¿Ha sido oportunista el actuar de las autoridades en el caso de Daniel Zamudio?

El Gobierno de Sebastián Piñera y sus autoridades han sido oportunistas desde el mismo momento de su instalación. Primero manipularon la justa causa del movimiento homosexual y sus demandas de regulación civil, invitándonos a La Moneda en medio de las protestas del movimiento estudiantil. Ahora, aprovechando la conmoción pública que provocó el asesinato de Daniel Zamudio enarbolan las causas del respeto, la dignidad y la no violencia, mientras al mismo tiempo reprimen a los jóvenes, estudiantes, mapuches y pobladores. El Ministro del Interior es el máximo responsable de la violencia social y la represión policial que se manifiesta en las calles, y el Ministro de Salud es culpable de las nulas campañas de uso del condón, pero ahora bailan juntos el baile de la tolerancia y la discriminación sexual.

Has dicho que falta escuchar a homosexuales de izquierda. ¿Por qué no existe un referente homosexual de izquierda más definido?

Existen referentes y es bueno enfatizar que no sólo se apuesta en el marco de la diversidad a un sólo referente, existen diversos y múltiples referntes que convocan de distintas formas una transformación social, el problema es que en medio de un gobierno de derecha las organizaciones de la diversidad sexual están siendo tentadas por el poder que las manipula políticamente, quedando muy poco espacio para otros discursos más libertarios y antihegemónicos.