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23 de Abril de 2012

Ministra Schmidt lanza programa para reducir deserción escolar de madres adolescentes

Sólo el año 2009, 39 mil 240 adolescentes mujeres declararon haber desertado del sistema educativo por razones de embarazo o maternidad.

Por UPI
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La ministra del Sernam, Carolina Schmidt, lanzó el programa “No te pierdas, sigue adelante“, dirigido a madres adolescentes y escolares embarazadas, que busca disminuir el 80% de deserción escolar.

La iniciativa está destinada a una parte importante de las 40 mil jóvenes que cada año quedan embarazadas en Chile.

Sólo el año 2009, 39 mil 240 adolescentes mujeres declararon haber desertado del sistema educativo por razones de embarazo o maternidad, mientras que sólo mil 980 hombres lo habían hecho por razón de paternidad.

Según Schmidt, “a través de este programa, el Sernam busca ayudar a esas madres adolescentes que año a año, valientemente deciden acoger a sus hijos a pesar de lo difícil de la situación. El 80 por ciento de estas madres deja los estudios, y como se sienten solas y sin proyecto de vida, a los dos años el 60 por ciento es mamá por segunda vez, con la perpetuación del círculo de la pobreza que esto significa”.

“Este programa les entrega apoyo para que ellas puedan seguir sus estudios y los compatibilicen con la crianza de sus hijos. Además, les entrega herramientas emocionales que les dan seguridad y autoestima para continuar con los estudios y opten a un trabajo o profesión para sacar adelante a sus hijos”, señaló.

Además la titular del Servicio Nacional de la Mujer, se reunió con un grupo de 40 madres adolescentes beneficiarias de “Maternidad Adolescente” de Sernam, el que ya ha atendido a más de mil 100 jóvenes.

Este programa tiene entre sus objetivos intervenir con miras a la reinserción escolar y social, asegurar el buen cuidado de sus hijos y la sana construcción de vínculo y apego, contribuir a la prevención de un segundo embarazo, apoyar la construcción de un proyecto de vida y contribuir al ejercicio de la corresponsabilidad, integrando al padre en los procesos de embarazo, parto, crianza y educación del hijo.

Las edades de las jóvenes que han participado van entre los 11 y 18 años.

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