Moreira no es de los arrepentidos: “La lealtad siempre hay que demostrarla”
El diputado UDI admitió que hubo violaciones a DDHH pero no se arrepiente de apoyar dictadura, en respuesta al arrepentimiento público manifestado por el vocero de Gobierno, Andrés Chadwick.
El diputado Iván Moreira (UDI) fijó su postura ante el arrepentimiento público manifestado por el ministro vocero de Gobierno, Andrés Chadwick, por apoyar al régimen militar, y dijo entender que es una reflexión personal de la autoridad; no obstante, sostuvo que las lealtades se mantienen en las buenas y en las malas.
“El arrepentimiento y el perdón son reflexiones personales de las personas, y si las ha hecho el ministro Chadwick, él sabrá por qué las habrá hecho”, precisó Moreira, al considerar que lo realizado por el secretario de Estado es “un gesto político”.
A juicio del parlamentario del gremialismo, distinto es una reflexión personal y su consecuencia de lealtad en el tiempo a sus convicciones. “En el plano personal, yo quiero ser bien fuerte y claro, yo no me arrepiento en la vida de las cosas que hice o no hice. Yo reivindico las obras buenas, modernizadoras y el gran gobierno militar encabezado por el presidente (Augusto) Pinochet, y la lealtad en las buenas y en las malas siempre hay que demostrarlas”.
“El gobierno militar, en el caso personal y para muchos chilenos, es un gobierno que salvó a una generación del marxismo, del comunismo internacional, que parece que muchos han olvidado. En el tema de los derechos humanos, indudablemente con el paso del tiempo, uno no puede ser ciego de que efectivamente hubo violaciones a los derechos humanos, y decir lo contrario sería una mentira”, explicó.
Sin embargo, Moreira agregó que “eso no significa de que yo vaya a estar a favor del atropello de los derechos humanos, pero sí que no me arrepiento y no me voy a arrepentir jamás, y voy a morir con las botas puestas, por lo que en un momento importante de la vida de este país me tocó vivir desde muy joven”.
Según el diputado UDI, es injusto que en la actualidad, en democracia, se intente coartar la libertad de expresión y poder hacer un acto público, porque ha habido diversos homenajes, al apuntar al acto realizado este domingo en el Teatro Caupolicán, donde se exhibió un documental sobre el fallecido general y dictador.
Explicó que “yo no fui por razones fundadas, pero no está en juego mi lealtad al gobierno militar, lo que está en juego es que nadie, por razones muy especiales de la familia directa del general Pinochet fue, tampoco fue nadie de la Fundación Pinochet, podrá haber ido el nieto, pero representatividad no hubo, porque principalmente me deja mucho que desear quien está detrás de este acto (…). Un acto instigado por algunas personas desde Punta Peuco no procede… Esto claramente es una operación política de inteligencia, contra el malestar de un grupo de ex militares y de él mismo (Álvaro Corbalán), porque él no tiene nada que perder y lo que hace con esto este grupo de personas, cuyo vocero es un verdadero títere, lo único que hace es perjudicar más a los militares, y seguimos con el juego de volver a temas del pasado, si hemos ido avanzando durante todos estos años, pero eso no le da derecho a la izquierda a prohibir estos actos”.
“Más aún cuando en Chile, cuando el Partido Comunista jamás ha hecho un mea culpa por el Frente Manuel Rodríguez, que era el brazo armado, no hace mea culpa, cuando tiene de madrina a la viuda del ex dictador asesino de la Alemania ‘democrática’, la señora Honecker, que fue parte del gobierno, no sólo fue primera dama”, añadió.