Ossandón: “Si el Gobierno cambia de estrategia, podemos ganarle a Bachelet”
El alcalde oficialista más crítico con La Moneda reconoce que debido a sus posturas, "Carlos Larraín me ha retado muchas veces", pero que nadie en el gobierno le ha pedido que baje el tono de sus dichos.
Ha sido uno de los más duros con la administración de Sebastián Piñera. Sin embargo, el alcalde de Puente Alto, Manuel José Ossandón, considera que sus cuestionamientos “buscan generar los cambios para lograr un segundo gobierno de centroderecha”.
Para el candidato senatorial de RN en Santiago Oriente, el principal problema de la derecha es que “a mi juicio, es que tenemos un Gobierno con una muy buena gestión, con muy buenos números y con una baja aprobación, y con candidatos presidenciales muy mal parados”, sostuvo, en entrevista con el diario El Mercurio.
Ossandón cree que el tema es “la forma como se transmiten las cosas. Por ejemplo, en enero dije que no había que atacar a la ex Presidenta Bachelet, porque la van a consolidar y la van a levantar. Todos la atacaron, y cuál es el resultado: una ex Presidenta ultra consolidada, marcando nuestra agenda.”
El edil de Puente Alto asegura que nunca le han pedido que “baje el tono” a sus críticas. “No tengo ningún interlocutor con La Moneda. Lo que más me duele es que muchos políticos de RN y la UDI me dicen ‘opinamos lo mismo que tú, pero no hay que decirlo’. Pero si no lo decimos, nunca vamos a cambiar”.
Al respecto, admite que “Carlos Larraín me ha retado muchas veces, porque no está de acuerdo con mi posición crítica, pero don Carlos respeta a las personas. Estoy seguro de que si el gobierno cambia de estrategia, podemos ganarle a la ex Presidenta Bachelet“.
“No tengo ningún problema en hacer primarias”, sostiene Ossandón acerca de su postulación senatorial por Santiago Oriente. “Hoy Chile no acepta más candidatos designados por secretaría“, agrega.
La solución a esto, afirma, es hacer “una tremenda campaña para recuperar la credibilidad, con mucha presencia en terreno y buenos políticos. En el fondo, más que dedicarse a atacar a los de enfrente, se trata de mostrar, sin crear expectativas y con una muy buena estrategia política, las obras del gobierno. Y, por otro lado, los que tengan posibilidades de ser candidatos presidenciales, que salgan a la cancha ya, porque nadie conoce lo que piensan y porque de otra forma están jugando el juego de Bachelet, que mientras más se demore en llegar, más fácil va a ganar”, concluye.
