Carabineros fustiga reportaje del New York Times que denunció sus actos de tortura a estudiantes
A través de una carta enviada al diario norteamericano que denunció su violento proceder en el marco de la últimas protestas la institución señala que algunas de la denuncias recibidas son originadas en "meras especulaciones a través de trascendidos de las cuales nadie se hace cargo".
A casi un mes de la publicación en el diario norteamericano The New York Times de un reportaje que aborda en detalles el violento proceder de carabineros en el marco de la últimas manifestaciones estudiantiles registradas en Santiago, en el que se apuntó la existencia de “lesiones y actos de humillación sexual contra los detenidos” junto a la labor de defensa de los voluntarios observadores de Derechos Humanos, la institución reaccionó a través del envío de unja carta al medio estadounidense.
En la misiva de dos carillas y que fue enviada el 5 de septiembre, Carabineros apunta sus reparos a la forma en que el medio extranjero presentó el reportaje, al tiempo que detalla las iniciativas del organismo policial en materia de cautelar los derechos de los detenidos, consigna Emol.
Bajo del título de “los voluntarios que vigilan las protesta en Chile” el conocido diario publicó el pasado 26 de agosto un texto en el que aborda las denuncias de los observadores de Derechos Humanos en contra del violento actuar de carabineros en las protestas organizadas por el movimiento estudiantil.
Entre las denuncias entregadas por los observadores de Derechos Humanos se incluyeron los dichos de la voluntaria, Marta Cisterna, quien señaló “estamos hablando de tortura: ellos (los estudiantes) acusaron que les metieron sus cabezas a la fuerza en tazas del baño, apuntaron con armas contra sus cabezas, que fueron golpeados hasta quedar inconscientes y que un oficial de policía se bajó los pantalones para mostrar sus genitales. Estos estudiantes fueron secuestrados en la práctica, detenidos en un autobús de la policía durante un máximo de ocho horas”.
A modo de réplica, la institución uniformada indicó que: “valoramos el rol de observación de las organizaciones de la sociedad civil. Éstas cumplen una importante tarea dentro de los principios de transparencia y rendición de cuentas del Estado de Derecho, a los que nuestra institución también adscribe, siendo algunas de sus materializaciones más recientes la creación e implementación del Departamento de Derechos Humanos y de sistemas de control de manejo de personas detenidas mediante el establecimiento de condiciones tecnológicas, entre otras”.
Carabineros igualmente valoró el rol que cumplen las ONGs por su rol de mediadoras “entre las fuerzas policiales y los manifestantes violentos”, además de entregar “información a Carabineros sobre situaciones irregulares que son investigadas y sancionadas cuando corresponde”.
Meras especulaciones
El texto destaca, además, que “la detención de alguno de estos observadores se ha verificado en situaciones excepcionales y únicamente cuando éstos han obstaculizado la actuación policial”.
Asimismo los uniformados distinguen el trabajo de los observadores, a quienes definen como “organizaciones de voluntarios”; subrayando el rol del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) como la “principal institución responsable de la promoción y protección de los derechos humanos en el país con la cual se efectúan coordinaciones(…) Cada vez que se efectúan manifestaciones públicas, personeros del INDH ingresan con facilidad a las comisarías en que existieron detenidos; al mismo tiempo, los oficiales de Carabineros de la unidad de derechos humanos efectúan auditorías y evaluaciones de la actuación policial”.
La institución liderada por el general director, Gustavo González, criticó que el New York Times no hiciera mención a la labor de su unidad de derechos humanos, al indicar que “de dicha situación y otros ejemplos de desarrollo de Carabineros en igual línea no da cuenta el artículo por ustedes publicado. En ese sentido, pensamos que un diario de la categoría del New York Times, en aras de la objetividad de la información entregada a sus lectores, debería cautelar que frente a un tema tan delicado como éste, se incluyera la posición de las diversas partes aludidas y se resguardara la seriedad de las afirmaciones expresadas por quienes manifiestan su opinión”.
Al abordar en concreto las denuncias realizadas en su contra, la policía uniformada señala, en los párrafos finales de su carta, que si ellos reciben denuncias responsables, instruyen las investigaciones administrativas pertinentes y que durante algunas de ellas se han detectado que son originadas en “meras especulaciones a través de trascendidos de las cuales nadie se hace cargo”.
El texto igualmente destaca los resultados de la encuesta CEP que apuntan a Carabineros “como la institución que despierta los mayores niveles de confianza ciudadana”.