Longueira: El desafío es que Chile sea el primer país desarrollado de Latinoamérica
"El problema del Chile de hoy es el alto costo de la energía", señaló el secretario de Estado en la apertura de la actividad, a la que fueron invitados representantes de las principales empresas generadoras de energía, de la minería, la construcción y diversos sectores productivos.
El ministro de Economía, Pablo Longueira, sostuvo este sábado en el encuentro Pro Inversión y Competitividad, que si bien las cifras macroeconómicas, de empleo y de productividad, permiten vislumbrar que el país está en el camino para entrar al mundo desarrollado, se requiere asegurar la competitividad de la economía chilena para ello.
“El problema del Chile de hoy es el alto costo de la energía”, señaló el secretario de Estado en la apertura de la actividad, a la que fueron invitados representantes de las principales empresas generadoras de energía, de la minería, la construcción y diversos sectores productivos.
Longueira destacó el esfuerzo que hizo el país en desarrollar capital humano, en los 25 años pasados, y ahora hay que asegurar los recursos energéticos que permitan cumplir el desafío de ser el primer país desarrollado de América Latina, porque el alto costo de la energía afecta tanto a las PYME (Pequeñas y medianas empresas), como a las grandes.
“Cuando los chilenos compran un saco de cemento, 35% de ese saco es energía, lo mismo se aplica en todo lo que producimos”, dijo Longueira, y hay que buscar las fórmulas para lograr un “gran acuerdo nacional, que permita bajar costos, disminuir trámites y acelerar proyectos”, para lograr las metas económicas del país.
Luego del inicio de la jornada, el ministro invitó a la prensa a retirarse, puesto que la jornada se haría a puertas cerradas con los representantes de las industrias y el Ejecutivo. Tampoco se vieron representantes del Legislativo.
Al mediodía, organizaciones ambientalistas, se apostaron afuera del hotel en que se desarrollaba el encuentro, para realizar una “funa” en contra de los proyectos macroenergéticos que, según dicen, atentan contra el medio ambiente.