Senador Chahuán propone crear memoriales para 'víctimas del aborto'
El texto legal establece que se autorizará “la construcción de monumentos en memoria de las víctimas inocentes de abortos, los que se emplazarán en la Plaza de la Constitución frente al Palacio de La Moneda, y en un lugar destacado de las dependencias con acceso de público, del edificio del Congreso Nacional, en Valparaíso”.
Levantar dos monumentos, uno en la Plaza de la Constitución en Santiago y otro frente al Congreso Nacional, en Valparaíso, “en memoria de las víctimas del aborto en nuestro país” es el objetivo de un proyecto de ley que hoy dio a conocer el Senado a través de un comunicado
El autor de la moción es el senador RN Francisco Chahuán, quien argumenta que “el drama inherente al aborto es una cuestión sin discusión. Más aún, cuando lo dramático del acto afecta no sólo a la madre de la criatura sino que, especial y definitivamente a esta última, absolutamente indefensa ante su agresor, que actúa sobre seguro, y ante la imposibilidad más absoluta y radical de defenderse por parte de la víctima”.
El texto legal establece que se autorizará “la construcción de monumentos en memoria de las víctimas inocentes de abortos, los que se emplazarán en la Plaza de la Constitución frente al Palacio de La Moneda, y en un lugar destacado de las dependencias con acceso de público, del edificio del Congreso Nacional, en Valparaíso”.
El financiamiento de las obras se obtendría mediante colectas públicas, donaciones y otros aportes privados. Las colectas se efectuarán en las fechas que determine una Comisión Especial que estaría compuesta por “dos senadores y dos diputados, elegidos para sus respectivas Cámaras; más un representante del Ministro del Interior y de Salud; Conferencia Episcopal de Chile; Iglesias Evangélicas de Chile; Colegio Médico de Chile y Colegio de Matronas de Chile”.
El senador explicó además que “las víctimas inocentes de los abortos, esto es, aquellos que no alcanzaron a nacer, a causa de las maniobras desarrolladas para impedirlo, merecen no solo nuestro reconocimiento, sino que también el del Estado, que por mandato constitucional está obligado a proteger la vida del que está por nacer, como lo consagra el articulado de la Carta Fundamental”.