Las pruebas que incriminan a Luis Eugenio Díaz en escándalo de las acreditaciones
El ex presidente de la CNA mantenía una larga y estrecha relación con la Universidad Internacional SEK. En correos electrónicos incautados por la PDI queda en evidencia cómo Díaz ejercía su poder para ayudar a la acreditación del plantel.
Soborno, cohecho y lavado de activos. Esos son los delitos de los que se acusa al ex presidente de la Comisión Nacional de Acreditación, Luis Eugenio Díaz, quien permanece en prisión preventiva. Y no son pocas las pruebas que se acumulan en su contra.
Un reportaje de Ciper Chile pone de relieve la existencia de correos electrónicos entre el ex funcionario y el entonces rector de la Universidad SEK, José Enrique Schroeder, enviados en julio de 2011. En ellos, se evidencia la estrecha relación entre el plantel y Díaz. Según la Fiscalía Oriente, éste ya prestaba asesoría a la casa de estudios en el proceso de volver a acreditarse ante la CNA.
En uno de los correos, Luis Eugenio Díaz le pide al rector Schroeder que contrate a “una sobrinita”: la periodista Andrea Moraga. “Si tuvieras a bien contratarla”, dice el ex director de la CNA, “ciertamente yo la apoyaría con todo. De manera que al contratarla a ella contarías con mi asesoría permanente, a través de ella, en este periodo y en forma permanente, sin que sea necesario que me recompensen de ninguna otra manera”.
En el siguiente correo, el ex funcionario hace otra petición, que ésta vez lo incluye a él mismo: “Querido amigo: se me ocurre algo complementario, que quizás te sorprenderá. Te sugiero crear en la universidad la Dirección de Vinculación con el Medio y contratar a Andrea y a mí como director, con la misma renta que otros directores de la universidad, con la libertad para mantener una o dos consultoras que me demandan muy poco tiempo. Esto es absolutamente compatible con mi cargo en la CNA“, aseguraba.
Los beneficios para el plantel universitarios quedaban claros: “Ciertamente debo inhibirme cuando se trate la acreditación de la SEK pero comprenderás que el hecho de que yo esté en la universidad agrega mucho valor, es casi como un sello de calidad, perdonando la petulancia. Te aseguro que nadie se va a atrever a pensar siquiera en no acreditar una institución donde yo esté”.
Eso, sin considerar que como parte de la asesoría que brindaba a la institución, Díaz revisaba y corregía documentos, que luego eran presentados a la CNA como parte de su proceso de volver a acreditarse, sólo para ser nuevamente revisados por el mismo Díaz en el ejercicio de su cargo en la Comisión.
Conseguir la acreditación resultaba de vital importancia para la Universidad SEK, ya que a través de esto sus alumnos podían acceder al Crédito con Aval del Estado (CAE), ítem que sólo en el año 2010 significó ingresos por 400 millones de pesos.
“Los email de Díaz hay que entenderlos en el contexto de una relación antigua (…), que se sostenía en la necesidad financiera de la SEK de acreditarse y en el poder de Díaz para lograrlo“, consigna el reportaje de Ciper.