Chile suscribe ante la ONU acuerdo para potenciar acciones para combatir el cambio climático

Como un gran paso para lograr avances en materia de Cambio Climático, calificó la Ministra del Medio Ambiente, María, Ignacia Benítez, la inscripción de la cuarta NAMA (Acción Nacionalmente Apropiada de Mitigación), ante la Organización de Naciones Unidas, la que tiene por objetivo implementar a lo largo del país, instalaciones para la valorización de los residuos orgánicos sólidos municipales e industriales, los que contribuyen con un 3% del total de nuestras emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).

“Esta NAMA no sólo representa el compromiso que tiene Chile en el combate del Cambio Climático, sino que además nos confirma una vez más la relevancia que tiene el reciclaje y la valorización de los residuos orgánicos para ayudarnos a proteger nuestro medio ambiente. Por eso es importante que dejemos de pensar que todo es basura, y comencemos a mirar con otros ojos nuestros residuos, porque no sólo puede ser beneficioso para nuestra calidad de vida, sino que además, muchos pueden encontrar oportunidades de negocios en el reciclaje” agregó Benítez.

Asimismo se destacó que esta NAMA contribuirá para que Chile cumpla con el compromiso voluntario que adoptó ante las Naciones Unidas de realizar acciones apropiadas de mitigación, de modo de lograr una desviación de 20% por debajo de su trayectoria creciente de emisiones “business-as-usual” en el 2020, proyectadas desde el año 2007.

Con esta iniciativa igualmente “se espera valorizar cerca de 11 millones de toneladas de residuos orgánicos en toda la vida útil de los proyectos subvencionados y evitar más de 12 millones de tCO2e, a lo largo de la vida de los proyectos”, apuntó la autoridad.

Esta medida es fruto de la acción conjunta del Ministerio de Medio Ambiente de Chile, el Center for Clean Air Policy, y el Gobierno de Canadá, quienes durante el año 2012 realizaron dos estudios para el análisis de las potencialidades y alternativas para desarrollar programas de valorización de residuos orgánicos en Chile y determinaron que ese sector puede aportar considerablemente en la reducción de emisiones totales de una manera medible, reportable y verificable, además de ayudar con otros benéficos económicos, sociales y ambientales para el país.

Los alcances de la NAMA

La NAMA de Residuos Orgánicos de Chile, que viene a ser la cuarta de siete medidas registradas que están actualmente solicitando apoyo para su implementación, se compone de un paquete de cuatro acciones financieras y regulatorias, y se propone contribuir con la generación de biogás, electricidad y compost, a partir de residuos exclusivamente orgánicos, obtenidos de las técnicas de fermentación seca (no se incluyen los del sector silvoagropecuario). Dado lo anterior, uno de los ingresos más importantes del proyecto, además del pago por tratamiento, será la venta de energía eléctrica y la venta de compost. Por tratarse de energía renovable no convencional, también se considerará el bono o tributo verde con que cuenta esta energía a partir de la ley 26.190. Se espera una inversión del sector privado de US $ 130 millones.

Es importante señalar que un porcentaje de los residuos que tratarán las plantas de valorización provendrán de los gobiernos locales y serán orgánicos. De forma de compensar económicamente a la localidad que acoja los proyectos, se ha considerado que el municipio respectivo pagará sólo una pequeña fracción de los costos de tratamiento, tentativamente un 10%, y recibirá un fondo de inversión.

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