Peligro en el agua: Se detectó exceso de arsénico, manganeso, hierro y fluoruro en napas de Quilicura

Desde 1978 y hasta 1996, las comunas más populosas de Santiago depositaron su basura en Quilicura, justo antes de que esa comuna se transformara en el nuevo epicentro de la explosión inmobiliaria. Bajo las toneladas de basura que aún permanecen en el lugar, están las napas subterráneas desde donde Aguas Andinas extrae el agua que consumen las más de 200 mil personas que hoy viven en Quilicura.

El Dínamo tuvo acceso a la investigación que lleva adelante la Brigada Investigadora de Delitos Contra el Medio Ambiente de la PDI, que en junio del 2012 concurrió a las cercanías del ex vertedero y tomó muestras en napas subterráneas del lugar, señalando que la presencia de hierro sobrepasó en un 9% lo permitido por la norma chilena, el manganeso lo hizo en un 1641% y el fluoruro en un 156%. La presencia de arsénico en el agua supero en un 50% lo establecido en dicha norma.

En otro de los casos, que midió la salubridad del agua utilizada para riego, el manganeso y el fluoruro superaron lo permitido por la norma en un 773% y 281%, respectivamente. Según aclaran fuentes de la propia PDI, la presencia de estos elementos tóxicos en los pozos no significa que el agua potable en Quilicura esté contaminada, al menos no necesariamente, sino que existe riesgo de contaminación.

Francisco Saavedra, quien presentó la denuncia que gatilló la investigación policial, señala que  la presencia de arsénico, manganeso, hierro y fluoruro en las aguas viene a comprobar que el ex vertedero está contaminando las napas de la comuna. El ingeniero en prevención de riesgos y medio ambiente, que realizó su tesis universitaria sobre este tema detectando así las irregularidades, se pregunta ¿qué pasó con las platas que se destinaron para sellar el ex basural?

Las platas

El 2007 el PNUD (Programa de las Naciones Unidas Para el Desarrollo) aprobó un proyecto por cinco millones de dólares para saneamiento para los ex vertederos Cerros de Renca y Lo Errázuriz (otro ex basural que se ubicaba en la comuna de Estación Central).

La iniciativa contemplaba la extracción del biogas que se acumula en los basurales, la impermeabilización del vertedero (para evitar la filtración de líquidos tóxicos a las napas subterráneas), el traslado de cables de alta tensión ubicados sobre el ex vertedero Cerros de Renca y la limpieza de los lugares aledaños para evitar incendios.

El proyecto sería financiado por el Estado de Chile, a través de platas de la Subsecretaria de Desarrollo Regional y del municipio de Quilicura. El 28 de junio del 2007 se le entregaron 605 millones de pesos al PNUD para la ejecución del proyecto en Quilicura, pero el paso de los años demostró que no se había avanzado. Un informe de la Contraloría del 12 de agosto del 2011 evidenció una mala rendición de los dineros. Al detectar esta situación, la SUBDERE congeló la entrega de recursos.

Según lo informado por el ente contralor, existen irregularidades como el arriendo de vehículos en Concepción, a pesar que el proyecto se debía ejecutar en Santiago, la imposibilidad de acceder a la documentación original, la no existencia de actas de recepción de las obras realizadas, diferencias entre los montos señalados en el resumen y las cifras respaldadas por boletas y facturas, y la ilegibilidad de algunos documentos.

Además, el 12 de julio del 2011 personal de la Contraloría acudió al ex vertedero Cerros de Renca en compañía de fiscalizadores de la SEREMI de Salud, quienes detectaron que no existe tratamiento para los líquidos tóxicos del ex basural, ni se registra monitoreo de las aguas subterráneas, entre otras falencias. Estas mismas observaciones fueron hechas por la SEREMI en cuatro inspecciones realizadas durante el 2010. Como consecuencia de las fallas detectadas, se realizó un sumario al municipio de Quilicura en 2010, que finalizó con una multa de 20 UTM. En julio del 2011 se ordenó un nuevo sumario en contra de la municipalidad.

Un nombre que se repite

Alejandro Smythe es el actual asesor jurídico de la Municipalidad de Quilicura, además de ser el secretario ejecutivo del Consejo de Alcaldes Cerros de Renca (que agrupa a los 16 municipios que vertían sus desechos en el ex vertedero y que existe desde 1978 sin contar con personalidad jurídica), y haber sido director regional de la CONAMA entre el 2006 y el 2009. Además, es el encargado en Chile del Proyecto Atlas, del PNUD, encargado de recuperar terrenos que han sido utilizados como basurales. Es decir, Smythe es el hombre que tenía todas las conexiones en este tema.

En la declaración que prestó a la PDI el 11 de junio del 2012, Smythe se refirió al proyecto que debía solucionar el problema “en el año 2007 fue posible suscribir un convenio con la Intendencia de la Región Metropolitana, la SEREMI de Salud, la CONAMA, el PNUD y el Municipio de Quilicura en su calidad de Presidencia del Consejo de Alcaldes, que permitieron la inversión de seiscientos millones de pesos en el lugar para la realización de las medidas de contingencias más urgentes, como para la confección de los estudios ambientales y de ingeniería que permitieran la materialización de un parque intercomumal. Esta fase I de un plan maestro de recuperación del lugar, terminó con la obtención de un RCA (resolución de calificación ambiental) en el marco de una DIA (declaración de impacto ambiental) presentada a evaluación ambiental, procedimiento que estuvo a cargo del PNUD y que fue rendido satisfactoriamente”. Según Smythe, no hubo problemas con la rendición de los gastos, a pesar de lo planteado por la Contraloría.

Sobre el estancamiento del proyecto de saneamiento, Smythe es escueto “las fases siguientes de ingeniería de detalles e implementación de medidas, así como de construcción de un parque, si bien fueron recogidas en sendos proyectos presentados a financiamiento regional y recomendadas técnicamente, nunca fueron aprobadas para su ejecución”.

El peligro tóxico

Andrei Tchernitchin es un experto toxicólogo de la Universidad de Chile y, en conversación con El Dínamo, advirtió sobre la peligrosa presencia de arsénico, hierro, manganeso y fluoruro en las aguas que consumen los quilicuranos.

“Una exposición crónica al arsénico produce cáncer pulmonar, de la vejiga, del riñon, del hígado y de piel. Si es menos crónico, aumenta las posibilidades de ataques cardíacos en gente joven y dispara los accidentes vasculares. Además, afecta el sistema nervioso y una exposición breve puede aumentar los números de abortos espontáneos y afecta el feto directamente. En los niños que estuvieron expuestos aumenta la moralidad por enfermedades pulmonares”, enumera Tchernitchin.

Sobre la exposición a fluoruro es claro “aumenta las fracturas oseas en varones y damas después de la andro o menopausia. Cuando bajan las hormonas sexuales, se produce un periodo de modulación osea, si en ese período hay más fluoruro, los huesos se endurecen, pero se ponen más frágiles, como si fueran cristales”.

Respecto al manganeso, dice que “aumenta el daño al sistema nervioso central y provoca parkinson”. Sobre el hierro señala que “es un oxidante que puede producir daño en distintos órganos. Incluso algunos estudios plantean que podría facilitar el desarrollo del cáncer”.

El toxicólogo se mostró especialmente interesado en los datos emanados del informe de la PDI, ya que según la información que maneja el sector nor poniente de Santiago podría estar especialmente contaminado “existen relaves tóxicos enterrados en Rungue, que es un estero de Lampa que desemboca en Pudahuel, y que proviene de la unión del Estero de Chacabuco con el de Til Til, que pasa por Colina, donde hay dos tranques de relave muy grandes. Uno es de Codelco y el otro es de Angloamerican, este último es el más peligroso, ya que después del terremoto del 2010 se hundió una de sus paredes, por lo que podrían existir filtraciones de fluidos tóxicos hacia las napas subterráneas”.

El experto recuerda que en Lampa también se ha encontrado arsénico en las aguas que consumen las personas, y por lo mismo, anuncia que el Colegio Médico quiere realizar un catastro de norias en toda la zona nor poniente.