Larroulet y Asamblea Constituyente: "Es abiertamente ilegal"
El titular de la Secretaría General de la Presidencia señaló además que la propuesta de reforma tributaria de la candidata presidencial Michelle Bachelet era "confusa y contradictoria".
Como “abiertamente ilegal” calificó el ministro Secretario General de la Presidencia, Cristián Larroulet, las propuestas de asamblea constituyente emanadas desde diversos sectores políticos, señalando que, a su juicio, dicha iniciativa “debilita la democracia“.
“No corresponde a la institucionalidad chilena, se viola la propia Constitución. Es abiertamente ilegal”, sostuvo el secretario de Estado.
“Además, nos pondríamos como en Venezuela y Nicaragua, debilitando la democracia”, acotó.
En conversación con Radio Agricultura, Larroulet también se refirió a la propuesta de reforma tributaria de Michelle Bachelet. “El alza de impuestos de 20 a 25 por ciento genera un alza de mil millones de dólares, no 8 mil como plantea Bachelet. Entonces ¿cómo va se a financiar esto, subiendo el IVA, el arancel?”, fustigó.
“Todo es muy confuso y contradictorio”, afirmó el ministro.
Ley del Lobby: Queremos información totalmente transparente para la opinión pública
El titular de la Segpres abordó además la discusión en torno a la ley del lobby, manifestando su optimismo en que, tras diez años de debate, finalmente se llegue a una conclusión.
En tal sentido, indicó, la propuesta del Ejecutivo, que contempla un registro en la base de datos de la páginas Web de las instituciones involucradas, “pone énfasis en la transparencia de la actividad del lobby, es decir, los ministerios, funcionarios públicos, instituciones del Estado, etc. están incluidas en este proyecto”.
Larroulet adelantó además que el ministerio Secretaría General de la Presidencia contará con su propio registro. “Queremos una información totalmente transparente para la opinión pública, que sepan los movimientos que se realizan, ya sea desde una empresa, una ONG, hasta un gerente”, sostuvo
“No corresponde que se mantenga oculto, puesto que se presta para sospechas de la actividad política, debilitando la democracia”.
El secretario de Estado finalizó expresando su optimismo, esperando que “luego de diez años de debate por fin se acepte trabajar con fuerza en el tema del lobby”.
