Carolina Schmidt 'bailando con la fea': El costo político de un compromiso familiar
Después de su turbulento aterrizaje en Santiago tras su criticado viaja a Italia se prevé una nueva baja en las encuestas de la ministra de Educación. Al interior de su cartera se comenta que está poco cómoda en el cargo y que dejó de atraerle el servicio público.
Esta semana se dará a conocer la encuesta Adimark del mes de junio. Hace unos meses el sondeo solo traía buenas noticias para Carolina Schmidt, que desde su llegada al Gobierno se empinó como una de las figuras mejor evaluadas del gabinete.
Se hizo fama de buena negociadora en el proceso discusión y votación del posnatal de 6 meses, uno de los logros más exhibidos por este Gobierno, y su figura impulsando campañas de prevención de maltrato a las mujeres le creó un aura que la comenzaba a proyectar en una carrera política más allá de la actual administración.
Eso hasta que llegó al Ministerio de Educación y pasó de un 71% de aprobación a un 35% en el mes de junio en la misma encuesta, quedando como la ministra peor evaluada. Y las proyecciones para este periodo, luego de su viaje a Italia, no son mejores.
A pesar de esto, altas fuentes de La Moneda aseguran que el tema no preocupa y que ni se mencionó en el último Comité Político. Añaden que al momento de embarcarse a Europa, la ministra Schmidt conocía el costo político que tendría su viaje y que, por lo tanto, asumirá las consecuencias.
Las mismas fuentes afirman que “probablemente” Schmidt no seguirá en la esfera política luego de que termine el gobierno de Sebastián Piñera.
Esta decisión podría verse reflejada en que la ministra ya no comenzó una campaña para las próximas elecciones parlamentarias, entre otras razones, porque sabía de antemano el costo que significaba llegar a la cartera peor evaluada durante este gobierno, la misma que dejó con el 36%, 38% y 27% de aprobación a Joaquín Lavín, Felipe Bulnes y a Harald Beyer, respectivamente.
Operación retorno
La titular del Mineduc tuvo un turbulento aterrizaje en Santiago, tras tomarse vacaciones en Italia -donde celebró el aniversario 20 de su matrimonio–, los mismos días en que los liceos designados como local de votación que habían sido tomados por sus estudiantes fueron desalojados por decisión del Gobierno, todo enmarcado por la paralización y movilización nacional del movimiento estudiantil, portuario y minero del pasado miércoles.
Para colmo, su periplo por Europa fue dado a conocer públicamente luego de que los estudiantes se tomaran el hall principal del Ministerio de Educación y pidieran hablar con ella buscando respuestas a sus demandas.
Así, a las inminentes críticas de estudiantes universitarios y secundarios, los que incluso piden la salida de Schmidt de la cartera, se sumaron las críticas realizadas por otros personajes del mundo educacional, como es el caso del rector de la Universidad Diego Portales, Carlos Peña, que señaló que el Gobierno tiene una “distancia emocional” con la ciudadanía.
También se suma el llamado del presidente Sebastián Piñera que, como trascendió, habría telefoneado a la ministra para manifestar su molestia por no cambiar la fecha del viaje. El llamado de atención fue desmentido luego por la propia ministra al llegar al país, quien aseguró que no había existido “tirón de orejas” alguno.
“Verde por irse”
El presidente de ANDIME, Asociación Nacional de Funcionarios del Ministerio de Educación, Nelson Vivero, asegura que al interior de la cartera es comentario obligado la inconformidad de la ministra Schmidt.
“Está verde por irse. Pareciera que no está segura de sus condiciones para manejar la cartera de Educación”, asegura y agrega que “pareciera que tiene un pie adentro y otro afuera del Ministerio”
Según el dirigente, además existe una incomodidad con la gestión del Subsecretario de Educación, Fernando Rojas, el hombre “duro” del ministerio, quien llegó con Lavín al Mineduc y que incluso sonó como reemplazante de Beyer, porque “es él quien lleva la agenda legislativa del ministerio”.
“Es difícil que alguien que quiere dialogar, como pareciera ser el caso de la ministra Schmidt, pueda hacerlo cuando hay otras personas que la llevan”, añade Vivero.
La defensa de Schmidt
Desde el Mineduc, sin embargo, descartan que la ministra se quiera desligar del trabajo público. Importantes fuentes de esa cartera señalan que sus intenciones eran seguir “compatibilizando” la vida política con la familiar.
Además afirman que el viaje a Italia estaba planificado “muchísimo antes” de asumir en el Mineduc y que no fue utilizado como “moneda de cambio” a la hora de aceptar la “cartera más difícil” del actual gobierno.
“Si hubiese esperado que no hubieran tomas, no hubiese salido nunca” señala otra alta fuente de Palacio, añadiendo que durante esa semana, el ‘rol negociador ‘ de Schmidt lo tomó el ministro del Interior, Andrés Chadwick, quien asumió las vocerías sobre el estado de la seguridad pública previo a las elecciones.
Además, afirman que si realmente hubiese sido urgente, “el Presidente la manda a llamar”, tal como lo afirmara, el ministro del Interior Andrés Chadwick durante la semana.
Los parlamentarios hacen sus apuestas
Otros que han seguido de cerca a la ministra Schmidt han sido los parlamentarios miembros de las comisiones de Educación e Investigadora del Lucro II de la Cámara de Diputados.
Uno de ellos, el DC Mario Venegas afirma que “a la Ministra no le va a ir bien en esta encuesta Adimark. Lleva muy poco tiempo y no ha habido ninguna acción de relevancia que permita mostrar un giro importante en lo que es su gestión que sintonice con las demandas ciudadanas y del movimiento estudiantil”.
Respecto al viaje, el DC añade que “por muy razonable que haya sido, me parece que en medio de las protestas y con los colegios tomados resulta bastante poco presentable. Ella debió haber evaluado el impacto que iba a tener. Fue un error haber viajado“.
Para el diputado UDI Romilio Gutiérrez, en tanto, el viaje de Schmidt “es un tema que resuelve ella con su equipo”.
“Creo que la ministra tuvo todos los elementos sobre la mesa y tomó la decisión. Como ella lo ha dicho hace mucho tiempo que tenía este compromiso, antes de asumir la cartera de Educación”, afirmó.
Menos tajante es la diputada ex PRI Alejandra Sepúlveda, quien señaló que “uno que está en política muchos años sabe que surgen complicaciones y uno tiene que postergar todo, pero desde el punto de vista personal, uno puede entenderlo, pero del punto de vista político, es más complejo”.
En sus últimas declaraciones públicas, la ministra sólo se ha referido a la situación de las tomas, impulsando medidas para mitigar la pérdida de clases para los alumnos que no se estén movilizando, apelando a la cercanía con los apoderados, lo que los alumnos han interpretado como “una forma de presión por parte del Ministerio para apaciguar las movilizaciones“
El tema del viaje, al parecer, para La Moneda ha quedado en esa semana y habrá que esperar los resultados de la encuesta y cómo evoluciona el conflicto con los estudiantes antes de dar la última palabra.