Experto defiende informe que incomoda al Gobierno: "La conclusión fue unánime, el Censo no cumplió su objetivo"

Los expertos que elaboraron el informe que recomienda repetir el Censo 2012 salieron a defender su trabajo, luego que el actual director del INE, Juan Eduardo Coeymans, comparara el diagnóstico de los errores en la encuesta con la recomendación de un médico para amputar una pierna, por lo que se haría necesario “recurrir a una segunda opinión”.

Coeymans señaló que “claramente uno tomará una segunda opinión, porque quizás no hay que cortar la pierna y se puede curar con una quimioterapia”.

El grupo de cinco economistas que elaboró el lapidario informe es respetado en el mundo académico nacional y fue convocado por el mismo Gobierno hace tres meses, luego que renunciara el director del INE que estuvo al frente del proceso del pretendido “mejor Censo de la historia”, Francisco Labbé.

El equipo estuvo formado por David Bravo, Director del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile; Isabel Millán, del Ministerio de Desarrollo Social, Felipe Zamorano, del Ministerio de Vivienda; Magda Ruiz, de la Celade y Osvaldo Larrañaga, académico de la Universidad de Chile e investigador del PNUD. Éste último conversó con El Dínamo y explicó porque el Censo 2012 debe repetirse, además de señalar que lo ocurrido fue grave porque se trata de la primera vez en la historia del país que esta medición recibe este tipo de cuestionamientos.

– ¿Cuál es la cifra más elocuente para decir que el Censo 2012 presenta fallas considerables?

La tasa de omisión poblacional es tres veces más alta que el promedio de los censos latinoamericanos de los últimos años. Además es una tasa de omisión que, si uno lo mira a nivel de comunas o de ciertos grupos específicos, es mucha más alta. Eso significa que se invalida la función del Censo que es contar a la población nacional.

Lo más grave fue que el Censo 2012 no cumplió su objetivo.

– ¿Qué le parecieron las declaraciones del director del INE?

Él fue quien nos invitó a formar parte de la comisión, esta fue una comisión asesora por lo que nosotros decimos es solo una recomendación. El director tiene todas las atribuciones para pedir otra opinión si lo estima conveniente.

– Las conclusiones de ustedes son categóricas… incluso recomiendan no tomar en cuenta las cifras del Censo 2012

Sí, nosotros trabajamos tres meses de forma intensiva. Entrevistamos a muchas personas, miramos muchas bases de datos, miramos muchos documentos, y finalmente llegamos a las conclusiones que llegamos. Además fue algo unánime, no hubo votos de minorías ni disensos. Nuestro juicio y evaluación son bastante sólidos.

Si el director quiere tener otra opinión, puede hacerlo, pero ojalá que eso no tomara demasiado tiempo porque acá el tiempo juega en contra de lo que requiere la estadística del país.

– El director dice que va a recurrir a expertos europeos… según vuestro trabajo, ¿hay espacio para una visión divergente?

Yo no puedo saber que va a opinar el experto europeo, pero nuestro juicio lo tenemos bastante claro. Tal vez nos podríamos haber tomado más tiempo si hubiéramos sabido que el director pensaba preguntar una segunda opinión y haberlo hecho de forma simultánea.

-Se ha hablado de un Censo más acotado, ¿qué preguntas se podrían sacar?

Lo que estamos diciendo es que para aliviar el trabajo que hay que hacer y los recursos que hay que gastar, se podría hacer un cuestionario más corto, porque eso simplifica todo el proceso. En ese sentido un Censo más abreviado. Nosotros no tenemos hoy una evaluación específica sobre que preguntas habría que sacar, porque el INE puede o no tomar nuestra recomendación. Si la toma, habría que meterse a evaluar específicamente como hacerlo.