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12 de Agosto de 2013

Sociólogo Hans Niemeyer inicia huelga de hambre tras ser sancionado por Gendarmería

El abogado defensor de Niemeyer, Julio Cortés, señaló que su defendido tomó la decisión tras prohibírsele ser visitado por sus familiares, debido a que funcionarios penales encontraron un cuchillo en la celda que comparte con otros reclusos

Por Redacción
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Hans Niemeyer (39), condenado a cinco años y 300 días de presidio efectivo por fabricación y colocación de un artefacto explosivo, inició este lunes una huelga de hambre de carácter líquida.

El sociólogo denunció sanciones penitenciarias injustificadas y ser objeto de una pena excesiva decretada, a su juicio, a modo de “señal política”.

Niemeyer inició este lunes una huelga de hambre líquida en la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago, lugar donde donde cumple una condena por la fabricación y colocación de un artefacto explosivo en la sucursal de Macul del Banco BCI, en noviembre de 2011.

El abogado defensor de Niemeyer, Julio Cortés, señaló que su defendido tomó la decisión luego de que Gendarmería le prohibiera ser visitado por sus familiares, debido a que funcionarios penales encontraron un cuchillo en la celda que comparte con otros reclusos, informó Bío Bío.

Niemeyer  cumple una condena de 5 años de presidio efectivo decretada por el tribunal y no podrá recibir visitas por un periodo de 20 días.

Según informó Emol, Niemeyer fue sancionado el pasado 7 de agosto -junto a otro interno- por el alcaide de la Unidad Especial de Alta Seguridad (UEAS) comandante Héctor Ibarra Lillo por infringir el artículo 78 del Reglamento de Establecimientos penitenciarios  que califica como una falta grave “el porte, tenencia, uso, fabricación o proporción de elementos para la fabricación de armas blancas o de fuegos, explosivos, gases o tóxicos”.

De acuerdo a la versión, a las 10:55 horas del miércoles, personal de la sala de circuito cerrado de televisión del penal informó sobre un incidente con un reo quien comenzó a lanzar estocadas con un elemento contundente en cuyo extremo se encontraba adosada una punta metálica.

El personal de servicio entonces procede a allanar el módulo del segundo piso donde está el profesional, y los gendarmes encuentran en la celda 310 –donde permanece recluido-  un cuchillo escondido bajo el WC, elemento que luego habría sido reconocido como propio por Niemeyer.

Dentro de dos semanas se podría resolver la admisibilidad del recurso de nulidad presentado por la defensa de Hans Niemeyer ante la Corte Suprema. De forma paralela al recurso de nulidad, que apunta al fondo de la sentencia, también se tramita un requerimiento de apelación que cuestiona el que se hayan desestimado la atenuantes en el caso, las que hubieran permitido a Niemeyer cumplir su pena en libertad.

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