Minvu condenó mal uso de subsidios de reconstrucción: "Es impresentable"
El ministro Rodrigo Pérez entregó los antecedentes a la justicia para hacer que los alcaldes de Cauquenes, Quirihue y Empedrado devuelvan los subsidios mal habidos, tal como lo denunció "Contacto".
Rodrigo Pérez, ministro de Vivienda y Urbanismo, se refirió a la investigación del programa “Contacto” el cual indagó en el mal uso de los subsidios de reconstrucción por parte de los alcaldes tras el terremoto y tsunami del 27/F.
“Para el Ministerio es algo impresentable. Al hacerlo dejan a alguien que necesita una vivienda sin la posibilidad de acceder a su casa, los recursos son escasos”, señaló en Canal 13.
Pérez indicó que los antecedentes ya están en la justicia para que quienes se beneficiaron en forma dolosa no solo deban devolver la vivienda, sino que enfrenten sanciones penales.
El ministro de Vivienda explicó la presentación de un proyecto de ley que busca que sea un delito calificado el obtener un subsidio con falsos antecedentes o tener una vivienda con subsidio no habitada, para así entregarla a los verdaderos necesitados, consignó La Tercera.
El programa “Contacto” mostró como los alcaldes de Cauquenes, Quirihue y Empedrado hicieron un mal uso de los subsidios para damnificados del terremoto.
Así fue como Juan Carlos Muñoz, jefe edilicio de Cauquenes, postuló a un subsidio de reconstrucción, pero como no cumplía con los requisitos por tener otra casa, hizo que su hijo Jorge Muñoz sacara ficha de protección social para recibir el beneficio.
En tanto, el alcalde Richard Irribarra y su madre postularon a la ayuda gubernamental, a pesar de que sus viviendas no se vieron afectadas por el terremoto del 27 de febrero de 2010.
Irribarra se defendió diciendo que “esa no es mi casa, mi casa es la de Martín de Rosas y cómo se cayó para el terremoto, como cualquier persona afectada, tenía el derecho de postular a un subsidio”.
Por su parte, el jefe comunal de Empedrado, Gonzalo Tejos, vio como su esposa María Cristina Aguilera recibió el subsidio al declarar que su vivienda quedó inhabitable, situación que fue corroborada por el director de obras del municipio y el Serviu, a pesar que esto no guarda relación con la verdad. A ella se sumaron su hermana Fortunata Tejos, dos sobrinos y otros familiares y amigos.