Al estilo MacGyver: Conoce la internet construida a partir de deshechos reciclados en Afganistán
Un nodo de la red se puede crear con aproximadamente US$60 de materiales comunes, como tablas, cables, tubos de plástico y latas, que sirven a toda una comunidad y que podrían significar una revolución para llevar internet a lugares aislados.
Más allá de los conocidos dramas que vive Afganistán debido a las múltiples guerra y conflictos que han marcado su historia, los habitantes de esta nación asiática también enfrentan grandes dificultades a la hora de conectarse a algo tan cotidiano como internet.
A partir de esta necesidad es que nace FabFi, un ambicioso proyecto open source que pretende crear una red de conexión a partir de casi cualquier cosa. La clave está en el reciclaje.
El proyecto, que depende del FabLab, del Centro para los Bits y Átomos del MIT en Estados Unidos, comenzó en la ciudad de Jalalabad, donde funciona como piloto para desplegar la red en otros lugares, consigna Fayerwayer.
Un nodo de la red se puede crear con aproximadamente US$60 de materiales comunes, como tablas, cables, tubos de plástico y latas, que sirven a toda una comunidad y que podrían significar una revolución para llevar internet a lugares aislados.
El financiamiento para esta novedosa red proviene de los mismos integrantes del grupo que la construye a pulso, también cuentan con apoyo de una beca entregada por la National Science Foundation de Estados Unidos. Los documentos y software necesarios se pueden obtener libremente.
Todo sirve
Los elementos que usan parecen extraídos del recetario del héroe de acción de los 80 MacGyver: routers inalámbricos comunes son montados sobre antenas caseras cubiertas con una malla metálica. Otro router sobre un reflector es instalado a una cierta distancia, y ambos routers crean entonces una red que entrega internet a toda una serie de reflectores instalados alrededor. La cantidad de reflectores que se pueden integrar es en teoría infinita, y la red de FabFi ya cubre casi toda la ciudad.
En la misma línea, los reflectores son construidos con lo que hay a mano: madera, metal, plástico, piedras, arcilla o casi cualquier cosa a la que se le pueda colocar la malla metálica alrededor. FabFi también diseñó los equipos para funcionar en base a una batería de auto, de modo que la red puede instalarse sin necesidad de red eléctrica en caso de que sea necesario.
Así la distancia más larga en la red FabFi instalada es de 3,8 kilómetros, y va desde el FabLab a la torre de agua del hospital público de Jalalabad. La red alcanza un promedio de 4,5 Mbps y la distancia máxima posible entre ambos puntos es de 15 km.
El gran logro del sistema es que entrega un modelo escalable de bajo costo para llevar internet a regiones que han estado aisladas de la red por guerras y pobreza. Asimismo, FabFi puede operar sin el control del gobierno y puede ser instalada en casi cualquier lado.
Sin ir más lejos, ya cuenta con copias. En Kenia ya se comenzó a trabajar en un proyecto similar, en conjunto con un proveedor de internet llamado JoinAfrica.