La derrota de Alvear, el golpe más duro para la DC
La senadora, una de las figuras mejor evaluadas de su partido, fue superada por el socialista Carlos Montes, pese a que se consideraba una carta segura.
“Estoy entera”, les dijo la senadora DC Soledad Alvear a sus cercanos, minutos después de haber reconocido públicamente la derrota que sufrió en Santiago Oriente. Pasadas las 23 horas cuando el resultado era indiscutible, la parlamentaria enfrentó grabadoras y cámaras acompañada de su marido Gutenberg Martínez, sus hijos, sus hermanas y el presidente de su partido, Ignacio Walker.
El resultado fue un duro golpe para su colectividad que daba por descontado su triunfo. En la tienda no sólo se esperaba que se impusiera al diputado socialista Carlos Montes, sino incluso que tal como ocho años atrás alcanzara la primera mayoría. Más todavía cuando la ex canciller era la figura mejor evaluada de la tienda en las encuestas y reconocida en forma transversal en el Senado por su dedicación a la labor parlamentaria y su disposición a llegar a acuerdos. Sin embargo, los pronósticos no se cumplieron. Y Alvear terminó en el cuarto lugar con un 20, 41% (cuando se había escrutado el 94% de los votos). Un porcentaje muy inferior al 43,81 que alcanzó el 2005.
Anoche, en la DC buscaban explicaciones para entender lo que había pasado. Un factor que se mencionó fue la estrecha disputa que libraron los candidatos de la Alianza. Más de un 47% concentró la competencia entre el ex ministro Laurence Golborne, que en abril bajó su candidatura a las primarias presidenciales del oficialismo, y el ex alcalde de Puente Alto José Manuel Ossandón (RN), quien resultó vencedor y de quien se dice le habría quitado votos a la parlamentaria en las comunas populares como Puente Alto.
Aunque en su partido e incluso sus cercanos consideraban difícil una caída electoral, Alvear y su equipo estaban conscientes desde el principio de la campaña de que esta elección se enfrentaba en condiciones muy distintas a la de hace ocho años.
En aquella ocasión, la ex ministra de Relaciones Exteriores llegó a competir con un compañero de lista, el socialista Gonzalo Martner, que no representaba una amenaza. De hecho, apenas logró el 5% de los votos. La senadora había alcanzado notoriedad como canciller de Ricardo Lagos y al disputar la candidatura presidencial de la Concertación con Michelle Bachelet, competencia que finalmente no se produjo porque Alvear declinó su postulación.
Ahora, en cambio, su compañero de lista Carlos Montes es un diputado que ha obtenido las primeras mayorías en la comuna de La Florida en las últimas elecciones, reconocido por sus pares en distintas oportunidades como el mejor parlamentario y con una eficiente red de trabajo en su distrito, además de contar con una estrecha relación con la ex mandataria.
Efecto primarias
Lo que también habría incidido en el resultado, sostienen en la DC, es el efecto negativo de levantar una candidatura propia a las primarias presidenciales que solamente llegó al 8%. Mientras el socialista hacía campaña por la ex mandataria antes del 30 de junio, Alvear tenía que promover la postulación de su camarada de partido, Claudio Orrego. “Llegó la hora, Montes al Senado, Bachelet a La Moneda”, era el eslogan con que el diputado comenzó a posicionarse en Santiago Oriente.
Además habría influido “una mala negociación parlamentaria”. Si bien la DC ahora tiene dos diputados electos –Claudio Arriagada (La Granja) y Jaime Pilowsky (Peñalolén)- en lugar de uno en la circunscripción (Jorge Burgos), muchos de los candidatos tuvieron bajas votaciones. Ese es el caso de Patricio Basso que alcanzó un 7% en La Florida.
En Alameda 1460 también mencionaron que el equipo de Alvear pecó de exceso de confianza en un momento de a campaña sobre el nivel de conocimiento y respaldo que la parlamentaria tenía en la circunscripción. Y otros apuntan al discurso conservador de Alvear en temas valóricos.
Pero las críticas también apuntaron al comando de Bachelet, pues se considera que el equipo de la carta de la Nueva Mayoría hizo importantes gestos a favor del diputado –como actos en La Florida- y la intervención del ex Presidente Ricardo Lagos quien lo apoyó públicamente hace unos días.
“Se nos vienen tiempos muy difíciles”
Pese al impacto del resultado, tras conversar con los medios, Alvear dirigió una reunión improvisada con sus cercanos en la oficina de la sede DC donde funcionó un centro de cómputos en el que se instaló su marido, el ex diputado Gutenberg Martínez para seguir los resultados. Allí la acompañaban los ex ministros Edmundo Pérez Yoma, Carlos Figueroa y Marigen Horkohl, los ex subsecretarios Clemente Pérez, Mauricio Jelvez y Jaime Arellano, los senadores Ximena Rincón y Andrés Zaldívar y el ex diputado Luis Pareto, entre otros. Junto con dar muestras de entereza, la parlamentaria advirtió que “se nos vienen tiempos muy difíciles”, en alusión a la situación que enfrenta su partido en la Nueva Mayoría. En esa línea, planteó que está convencida de la importancia que tiene la visión humanista cristiana en ese acuerdo político.
La ex canciller insistió en la necesidad de trabajar con unidad para la etapa que viene y criticó que muchos no estén dispuestos a asumir candidaturas difíciles. “Todos buscan una sandía calada o una tarea fácil”, sostuvo.
Y anunció que no renunciará a seguir trabajando en la esfera pública. “Tendría que nacer de nuevo”, señaló.