Investigación revela si el Parlamento cumple con la Ley del Congreso y la Ley de Transparencia
Luego de que a mediados del 2012 los parlamentarios aumentaran sus asignaciones en un tiempo récord, generando una polémica a nivel nacional, una agenda de transparencia fue promovida por los presidentes de cada cámara de ese entonces, la que tuvo una escasa acogida.
Periodistas del cuerpo de Reportajes del diario La Tercera, junto a expertos e investigadores de Chile Transparente y Ciudadano Inteligente, realizaron una revisión acerca del cumplimiento de las diversas tareas que los parlamentarios deben cumplir, de acuerdo a su Ley Orgánica y a la Ley de Transparencia.
Los ítems evaluados fueron:
– Comisiones legislativas:
Algunas de las sesiones de la Comisión de Educación del Senado son transmitidas a través del Canal del Senado. La Cámara de Diputados transmite casi todas las sesiones de las comisiones en vivo por Internet y permite el ingreso de los medios de comunicación.
La Ley del Congreso señala que las resoluciones de las comisiones serán públicas, sin embargo, también indica que los registros de las sesiones son privados, por lo que genera una contradicción y es por esto que el Senado se ha negado muchas veces a difundir los informes sobre proyector de ley.
– Asignaciones parlamentarias:
Luego de la polémica del 2012, el Senado comenzó a publicar un registro de los gastos operacionales de cada senador, que incluye arriendos, bencina, telefonía, alojamientos, viáticos, entre otros, como también los montos de dinero asignados a sus bancadas, a las asesorías legislativas y da a conocer los domicilios de las sedes parlamentarias.
Sin embargo, el Senado no publica actualizadamente las resoluciones del Consejo de Asignaciones Parlamentarias. En cambio, la Cámara de Diputados sí lo hace, aunque no en forma completa y también es menos detallada.
– Resoluciones de Comisión de Ética:
La Ley del Congreso obliga al Congreso a publicar las resoluciones de esta comisión en su página web, aunque a algunos parlamentarios les molesta por someterse al escrutinio público.
Tanto el Senado, que recientemente ha actualizado esta información, como la Cámara de Diputados han cumplido con esta disposición.
– Funcionamiento administrativo:
Las resoluciones de las comisiones de régimen interno a las que alude este ítem son un total misterio en cuanto a ambas cámaras, debido a que la información sobre compras, adquisiciones, contrataciones, nombramientos, entre otros, no es publicada.
– Asesores de senadores y diputados:
Desde el 2010, los asesores pasaron a ser empleados del Congreso y no de cada parlamentario, como era hasta ese entonces. La Ley de Transparencia exige que se publique “la planta del personal y el personal a contrata y a honorarios, con las correspondientes remuneraciones”.
El Senado cumple con esta medida, pero la Cámara de Diputados, por el contrario, no lo hace debido a que los contratos de estos empleados aún están como privados, lo que se solucionaría en el 2014.
– Ejecución presupuestaria:
Ambas cámaras deben tener una comisión revisora de cuentas, lo cual cumplen, aunque no difunden los acuerdos ni proposiciones que realiza esta comisión. Sin embargo, el Senado se defiende señalando que se publica un resumen anual sobre estas resoluciones en el Diario Oficial.
– Informe de fiscalización:
Existe un Comité de Auditoría Parlamentaria que fiscaliza el uso de asignaciones y que debe difundir sus resoluciones anualmente en su página web, sin embargo, las publicaciones se realizan con retrasos de hasta dos años.
– Solicitudes de información:
Además de los ítems anteriores, se constató que el procedimiento para solicitar información sobre el Congreso a través de la Ley de Transparencia es confuso para los usuarios.
