La respuesta de los ambientalistas a la cumbre eléctrica: También debieron recibirnos a nosotros

Los grupos ambientalistas también tienen algo que decir de la cita que reunió este jueves en La Moneda a los principales representantes de la industria de la generación, distribución y transmisión eléctrica con el Primer Mandatario, Sebastián Piñera, y los titulares de Energía y Medio Ambiente, Jorge Bunster y María Ignacia Benítez.

Y su mirada es bastante critica. El director Ejecutivo de Chile Ambiente e integrante del Movimiento Patagonia Sin Represas, Patricio Rodrigo, parte explicitando su molestia frente al hecho de la máxima autoridad reciba -por segunda vez en su mandato- a las empresas y no lo haya hecho con representantes de la sociedad civil. “El presidente puede recibir a la industria pero también debe estar disponible para recibir al mundo ciudadano, a quienes usamos la electricidad y nos vemos afectados por los costos de la energía así como por los impactos ambientales que tienen algunos proyectos en los territorios y en la comunidades“, enfatiza. 

“Lo que nosotros esperamos como movimientos sociales y socioambientales es que tanto los ministros y especialmente el Presidente den garantías de que están velando por el interés común y que no están favoreciendo a grupos corporativos en especial de carácter oligopólico, como ocurre en el tema de la generación eléctrica, que hoy está manejada por tres grandes empresas que controlan el mercado, evitan la competencia, han puesto barreras para la entrada de los proyectos grandes y también al ingreso de gas por Quinteros, frenando la competencia”, agregó.

A su turno, la directora de Chile Sustentable, Sara Larraín, destacó otro elemento al indicar que “a mi me parece legítimo y está bien que el Presidente llame a las empresas de vez en cuando y particularmente en este momento dónde están generando un proceso de boicot al tema de las licitaciones, lo que nos parece grave, ya que muestra las distorciones que tiene el mercado eléctrico en Chile“.

En la misma línea de Rodrigo, Larraín añadió que el hecho de que Piñera a la fecha no se haya reunido con los representantes de la ciudadanía, “demuestra la inequidad y el desbalance en cuanto a quién sopla al oído y a quién convoca el Presidente para tomar sus decisiones. Acá lo que el Presidente y el sector político debieran hacer es escuchar a los actores del mercado y también a la ciudadanía. El aparato político debe administrar el bien común y obviamente asignar deberes y derechos muy claros al mercado y a los ciudadanos y eso no está ocurriendo porque el Presidente sólo habla con los actores del mercado”.

Que la industria se ponga y la convocatoria al comité de ministros

De cara al emplazamiento de Piñera a las empresas, indicándoles que no han sido capaces “de garantizar la energía que el país requiere”, Patricio Rodrigo coincide con esta mirada al apuntar que “ellos nunca la han podido garantizar y siempre la industria, por lo menos la generadora, ha estado de crisis en crisis, tampoco se ha invertido estratégicamente en transmisión y se presionó al Estado para que se retirara de la política eléctrica. Por lo tanto, aquí no hay planificación, los planes son de corto plazo. Se ha perdido el horizonte y con ello la política eléctrica es un desastre en Chile y por eso pagamos tan caro y por eso enfrentamos los conflictos socioambientales de cara a los proyectos que se instalan en los territorios”

Larraín opina que se trata de un “llamado a ponerse” que al mismo tiempo confirma las mencionadas distorciones del mercado. Además indica que este hecho muestra “muy claramente que Chile tiene que avanzar en reestructurar los sistemas de licitaciones en los tamaños de los bloques de licitación y los plazos, ya que verdaderamente tiene que haber un liderazgos del Estado en cuanto poner la reglas del juego para los actores que van a participar en una área tan sensible y estratégica como la provisión de energía”. 

Respecto del trascendido que indicó que el Presidente se había comprometido ante la industria a convocar al Comité de ministros para que se pronuncie respecto del futuro del controvertido proyecto HidroAysén  antes de que finalice su mandato, Patricio Rodrigo y Sara Larraín se muestran más que escépticos.

“Son acciones dilatorias e inconducentes, el Presidente no puede pagar el costo de ser el que apruebe este proyecto cuando éste está congelado por decisión de los propios dueños, no se sabe nada de la línea de transmisión tal como ha dicho él. A Piñera no le conviene tratar de revivir un proyecto que está muerto“, sentencia el director Ejecutivo de Chile Ambiente.

A juicio de la líder de Chile Sustentable, resulta “insólito que las observaciones no estén procesadas, mas bien lo que hay aquí es que el Presidente Piñera evita tomar una decisión que, obviamente es impopular, ya que si se rechaza el proyecto va quedar mal con los empresarios y si lo aprueba, va a ser un punto negativo para su perfil y las aspiraciones políticas que tiene para el futuro. Creo que claramente le está haciendo el quite a la decisión”. 

“Creemos que debiera ser más claro en frente a la opinión pública y entender que es un proyecto que no tiene viabilidad y por tanto decirle a la empresa, mire esto no es viable técnica ni políticamente, reformúlenlo o llévenlo para el futuro. Aquí hay un procedimiento que está paralizado por la autoridad y eso no nos parece adecuado y hay una discrecionalidad excesiva en la dilación en el plazo de pronunciamiento. No es bueno para el país, no es bueno para las empresas y no es bueno para la ciudadanía tampoco porque mantiene un procedimiento de resolución en la incertidumbre y eso no corresponde”, puntualizó la ecologista y activista.