Sernageomin dio por cumplidas las exigencias hechas a proyecto Río Cuervo
Mientras el director del organismo dijo que Energía Austral presentó todos los estudios de suelo y vulcanológicos solicitados, los opositores plantean que se presentó sólo uno de los tres estudios de suelo solicitados por la autoridad, razón por la que buscan impugnar la aprobación ambiental.
El Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) entregó respaldo al polémico proyecto hidroeléctrico Central Río Cuervo al señalar que la firma Energía Austral, dueña de la iniciativa, presentó todos los estudios de suelo y vulcanológicos solicitados.
El organismo entregó este pronunciamiento mediante un escrito solicitado por la Corte de Apelaciones de Coyhaique, tribunal que estudia un recurso de protección presentado en octubre por ambientalistas en contra de la segunda iniciativa eléctrica que sobresale como la más grande de la Patagonia, tras HidroAysén, consigna La Segunda.
El director nacional de Sernageomin, Julio Poblete, recordó que en el escrito que el organismo que dirige dio por cumplidas las exigencias realizadas a la empresa.
De cara al estudio de detalle de erupciones y la actualización del Plan de Monitoreo y Alerta Temprana para Eventos Sísmicos y Volcánicos (PMAT), Poblete apunta que en julio de 2013 Energía Austral dio por cumplido este requerimiento.
Respecto del denominado informe de “modelo de velocidades”, señala que la empresa entregó una primera versión, la que completará con un segundo estudio que se iniciará 10 meses antes del comienzo de la construcción del proyecto.
Sobre la implementación de un plan de monitoreo del nivel de aguas subterráneas, el timonel del Sernageomin indica que debe efectuarse previo al inicio del llenado del embalse.
La versión de FIMA
Desde la otra vereda, los opositores al proyecto, liderados por la Corporación FIMA, retrucaron que, Energía Austral presentó sólo uno de los tres estudios de suelo solicitados por la autoridad, razón por la que buscan impugnar la aprobación otorgada por la Comisión de Evaluación de Ambiental de Aysén al proyecto el 10 de septiembre pasado.
Los ambientalistas insisten en que el proyecto de 640 MW de capacidad e inversión de US$733 millones se emplazaría sobre una falla geológica, lo que sería un peligro para la población adyacente a la hidroeléctrica.
Igualmente cabe apuntar que la semana recién pasada, el presidente de la Corte de Apelaciones de Coyhaique, acompañado por efectivos de la PDI, hicieron un sobrevuelo de la zona en donde se emplazaría el proyecto. Con esto, se darían por cumplidas todas las diligencias antes que el tribunal emita un fallo.