Los animales reclutados para la guerra: Desde el perro prisionero a los burros bomba
Por más exagerado o terrible que pueda parecer, en las últimas décadas sobresalen varios casos de utilización de animales como instrumento de guerra: Perros, ratas, delfines, gatos y burros han sido los afectados.
Responde al nombre de “Coronel” y es, según los Talibanes de Afganistán, el primer prisionero de guerra canino. Se trata de un perro de color pardo que luce una especie de chaleco armado con distintos dispositivos, que según los talibanes, eran usados por el ejército de Estados Unidos para sus acciones militares en Afganistán.
“Este animal portaba un localizador GPS, una pequeña cámara y una granada de fragmentación y era usado como soporte logístico por parte del ejército de Estados Unidos”, dice un hombre, tal como consigna BBC Mundo.
La fuerza internacional de la OTAN en Afganistán dijo estar al tanto de estas afirmaciones de los extremistas, pero se niegan a comentarlas.
Un portavoz de los talibanes declaró que la captura del perro se produjo tras una operación de las fuerzas estadounidenses, agregando que el animal estaba bien y que aún no se había decidido qué se hará con él.
Por más exagerado o terrible que pueda parecer, el caso no se aleja de lo que viene ocurriendo en las últimas décadas: utilizar animales como instrumento de guerra.
En Colombia en tanto, sólo en el año 2013 se registraron 359 víctimas fatales de minas antipersonales. Como respuesta, la policía se ha dedicado a entrenar ratas para que desactiven estos artefactos bélicos en los campos.
Según Luisa Fernanda Méndez, directora del proyecto Rattus, el hecho de que las ratas sean más pequeñas que los perros las hace más adecuadas para la misión de desactivar este tipo de armamento.
“Son mucho más fáciles de transportar y sostener. Además gozan de un excelente olfato que es casi similar al de los perros policía. Eso es una ventaja”, agrega Méndez.
El ejército de EE.UU. asimismo ha admitido haber entrenado delfines para usos militares en la guerra del Golfo Pérsico.
Debido a su inteligencia, los delfines también han sido utilizado como arma de combate, especialmente por el ejército de los Estados Unidos y la antigua Unión Soviética. Durante la guerra del Golfo Pérsico, en 1991, se utilizaron para la detección de buzos enemigos y para colocar minas.
Los militares estadounidenses fueron acusados entonces de utilizar a los animales en misiones suicidas, pero el Pentágono declaró que estaban entrenados para dejar el artefacto y después salir de la zona de explosión.
Pero uno de los casos más curiosos de uso de animales en los conflictos sucedió durante la Guerra Fría. Científicos estadounidenses pensaron que una de las mejores formas de espiar a los rusos sería utilizando a los gatos.
En 1961, en medio de la operación bautizada “Acoustic Kitty” (gato acústico), la CIA intentó modificar quirúrgicamente a un felino para que pudiera escuchar las conversaciones que se realizaban en la embajada soviética en Washington. El primer gato que estuvo listo, con una antena ubicada en la cola, se alejó del lugar a buscar comida y nunca volvió.
Después se procedió con mayor cuidado y tras una inversión de US$15 millones y cinco años de entrenamientos, se logró obtener el ejemplar ideal para la misión. Se llevó a la calle frente a un lugar donde se reunirían dos agentes rusos y se dejó allí para que iniciara sus “escuchas” de la forma más natural posible.
Al intentar pasar la calle, el gato fue atropellado por un taxi y murió. La misión “Acoustic Kitty” fue declarada como un fracaso.
Nuevamente en Colombia, los guerrilleros de las FARC han sido acusados de usar en varias ocasiones burros cargados con explosivos para acercarse a posiciones del ejército.
Se han reportado varios casos. El 8 de agosto de 2012, en la población de San Andrés de Cuerquia, Antioquia, a un burro le instalaron 25 kilos de dinamita, que fueron activados cuando el animal pasaba delante de un retén militar. En el hecho resultaron heridos tres agentes de la policía.
Y no es una práctica exclusiva del conflicto colombiano. En Afganistán, en abril de 2013, en acción atribuida a los talibanes, militantes cargaron con explosivos a un burro en la provincia de Laghman, detonándolo cerca de un puesto policial.