Ciudadano chino demanda al gobierno local hastiado por la contaminación
Li Guixin, habitante de Shijiazhuang, pide en su denuncia que las autoridades "cumplan con su deber" y luchen contra la contaminación, y que le recompensen con 10.000 yuanes (1.187 euros, 1632 dólares) por los costos económicos que la polución le ha provocado..
Un ciudadano de la provincia de Hebei, en el norte de China, presentó la primera demanda civil contra un gobierno local del país asiático por no frenar la grave contaminación que sufren millones de chinos, según publica hoy la prensa estatal.
Li Guixin, habitante de Shijiazhuang, capital de Hebei, pide en su denuncia que las autoridades “cumplan con su deber” y luchen contra la contaminación, y que le recompensen con 10.000 yuanes (1.187 euros, 1632 dólares) por los costos económicos que la polución le ha provocado en su día a día.
Li sostiene que el Gobierno debe acarrear con el gasto de los caros filtros de aire que instaló en su casa en diciembre, las mascarillas que compró o las máquinas que adquirió para hacer deporte en su hogar ante la peligrosidad de realizarlo en el exterior, recoge hoy el diario local “Yanzhao Metropoli Daily”.
“Pido una compensación para que cualquier ciudadano vea que, en esta neblina, nosotros somos las víctimas reales. No es sólo una amenaza para nuestra salud, también sufrimos pérdidas económicas, que deberían ser asumidas por el gobierno y los departamentos de medio ambiente”, aseguró el demandante.
Y continuó: “Ellos son quienes reciben los impuestos, que deben utilizar para frenar estos problemas”.
Para Li, quien sufrió a finales de año niveles de contaminación 12 veces superiores al máximo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera aceptable, “la polución del aire no parece ser muy urgente para las autoridades”.
“Parece que si no hay un gran número de muertes, no se reacciona. Pero, ¿quién garantiza que dentro de unos años, unas décadas, no aparezca el daño a la salud de este aire contaminado?“, destacó el ciudadano, cuya demanda aún no ha sido aceptada por el tribunal.
La región en la que Li reside es una de las zonas donde se ha activado hoy la alerta naranja, la de mayor gravedad después de la roja, por contaminación, una situación que afecta a una cuarta parte del país -centro y norte- y que se prevé que continuará hasta, al menos, este jueves.
Entre las zonas más afectadas también se encuentra la capital, Pekín, que hoy se levantó por quinto día consecutivo envuelta en una neblina grisácea y donde, debido a la alerta naranja, las escuelas suspendieron sus actividades al aire libre y se paralizaron algunas obras de construcción.
A las 18.00 horas de hoy (10.00 GMT), los niveles de concentración de partículas de un diámetro inferior a las 2,5 micras (PM 2,5), las más perjudiciales para la salud, alcanzaban los 488 microgramos por metro cúbico de aire en Pekín, casi 20 veces más que lo aconsejado por la OMS, según los medidores de la Embajada de Estados Unidos en la capital.
La contaminación es una de las preocupaciones más importantes de la sociedad china, que pide a las autoridades medidas más efectivas para mejorar la pésima calidad del aire, que ya afecta al sector agrícola del país, el 10 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de China.