Hernán Larraín: “Hay que replantear referencias al Golpe en los principios de la UDI”

El senador Hernán Larraín espera que en el consejo doctrinario de la UDI que se realizará el 11 y 12 de abril se incluya en los estatutos del gremialismo una nueva visión sobre el Golpe de Estado de 1973 y una condena a la violación de los derechos humanos en dictadura.

Y es que para Larraín, la actual declaración de principios del partido “tiene aspectos que reflejan otros tiempos, tiene lenguajes también que no corresponden, por lo que es altamente conveniente que se produzca una actualización, una nueva mirada, una nueva forma de presentar el fundamento a nuestro proyecto nuevo”.

“No se trata de inventar principios nuevos, sino que a partir de los principios esenciales, reformularlos, actualizarlos y ponerlos más en línea con lo que debería ser nuestro proyecto político a futuro”, indicó a La Tercera.

Es por ello que para el parlamentario, “las referencias al golpe de Estado o al rol de las Fuerzas Armadas me parece que deben ser replanteadas, pero sin dejar de considerar ese como un hito respecto de la violencia que ocurrió entre los años 65 y 90. Debemos incorporar esos conceptos en la perspectiva actual de la reconciliación y reencuentro entre los chilenos para fundamentar la unión del país”.

“El golpe de Estado fue una realidad, que por sus antecedentes tuvo una explicación en su minuto y una aceptación en ese minuto. Pero muy distinto es lo que ocurrió con posterioridad, con respecto a la violación a los derechos humanos, cuestión que a la luz del tiempo se hace clara de que fue muy masiva y sistemática y eso no puede sino merecer un repudio y una condena”, enfatizó.

Junto con ello, Hernán Larraín fue crítico en considerar que en los principios del gremialismo se siente “la ausencia del análisis de realidades nuevas, como el medioambiente y los temas de energía. Los temas de inclusión no están abordados tampoco. Y me parece importante reafirmar ciertos compromisos con aspectos esenciales en un partido popular como la UDI, que son la pobreza y la reducción de la desigualdad”.

“Si seguimos anclados en el pasado y no asumimos la realidad y los cambios, el riesgo es convertirse en un partido intrascendente, que no tenga influencia en nuestro futuro político”, sentenció.