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20 de Marzo de 2014

Víctor Pérez sobre los principios de la UDI: “Lo peor que podríamos hacer es cambiar nuestro origen”

El senador dice que espera llegar a la presidencia de la UDI defendiendo los principios del partido. Y en eso está la defensa a la dictadura. "No puedo estar arrepentido", dice recordando su época como alcalde designado en Los Angeles.

Por Daniel Martí­nez G.
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La Unión Demócrata Independiente (UDI) se apronta a elegir una nueva directiva. De cara a la derrota en las urnas en las pasadas elecciones presidenciales y parlamentarias, al interior del gremialismo hoy conviven dos posturas. A un lado están quienes creen que es necesario mantener el status quo y otros, que apuestan a ofrecer cambios para reencantar al electorado.

El senador Hernán Larraín y varios históricos del partido, junto a Ernesto Silva -diputado que lidera una de las listas en competencia- están del lado de la renovación; incluso hablan de hacer una revisión a la declaración de principios de la UDI, sobre todo en aquellos puntos que hacen alusión a la dictadura militar, además de apuntar al “recambio generacional”.

El senador gremialista Víctor Pérez, quien aspira a la presidencia de la colectividad, no es partidario de esta idea. Dice que para las bases del partido “no es tema” la declaración de principios. Y que el apoyo del partido a la dictadura “no es conflictivo ni complejo”.

-¿Por qué postularse a la directiva si hoy la discusión gira en torno a la renovación y al impulso de nuevos liderazgos?

Yo creo que ése es un debate artificial. Lo que quiere la gente es liderazgos, una directiva que restablezca el partido mayoritario y que podamos crecer. Fuimos derrotados y esa derrota no es por un problema de generaciones, sino que de liderazgos. Los que se dicen que de esta nueva generación formaban parte de lista a la directiva de la UDI que perdió, entonces es una discusión bastante estéril. Necesitamos un liderazgo fuerte, porque cuando ha sido así el partido creció.

– Pero las señales van hacia otro lado: Pablo Longueira, Evelyn Matthei y Jovino Novoa dieron un paso a un costado argumentando una renovación…

Yo he conversado con todos y estamos de acuerdo en generar una UDI con mucha potencia y un objetivo común, lo que en la década del ’90 nos constituyó como el partido más grande. Al entrar al gobierno perdimos esa homogeneidad en el discurso y no bastaba sólo un gobierno realizador… no bastó, claramente.

-¿Y por qué se perdió?

Porque nos dedicamos al gobierno y a las realizaciones, la gestión, claramente fue así pero la política es algo fundamental. Todo eso significó una pérdida de homogeneidad. Hay que recuperar el discurso común y por eso estamos discutiendo ahora.

-¿Existe la posibilidad de lograr una lista de consenso y no competir para lograr esa unión?

Siempre eso es posible. La próxima directiva tiene que ser muy sólida y de cambios profundos. Tengo la impresión de que eso es más legitimante si es en un proceso competitivo, pero eso no excluye un buen acuerdo.

-Silva, su oponente, propone una revisión de la declaración de principios del partido y el senador Hernán Larraín dice que es necesario revisar las referencias al Golpe de estado. ¿Lo cree necesario usted?

Nosotros tuvimos una derrota electoral no por nuestra declaración de principios. No es un obstáculo para crecer, por lo que no creo que sea un debate necesario. La UDI tiene un documento que se llama PAZ, donde expresamos nuestra condena a la violación de Derechos Humanos y tuvimos muchas reuniones con familiares de detenidos desaparecidos. Entonces eso no es un tema.

-¿Pero usted se ha planteado cambiar ese punto que es más polémico?

¿Es polémico para quién? Quizás para algunos…

-Es polémico para Hernán Larraín y Ernesto Silva, que estos días lo han manifestado en la prensa…

Pero… vuelvo a decir que las bases lo van a determinar. Para las bases de la UDI no es conflictivo ni complejo. Tenemos que hacer los esfuerzos en la propuesta de políticas públicas, en nuestro discurso a futuro. Las declaraciones de principios se hacen en un contexto pero ese contexto hay que respetarlo y valorarlo también, y mantenerlo. Quizás en la declaración de principios la parte sobre la mujer no está alineado con la fuerza que lo llevamos hoy, el que más representantes mujeres tiene, a lo mejor sin decirlo tanto. Algunos hablan mucho de la paridad, pero tuvieron la mayoría en los 4 años pasados y nunca nombraron a una mujer presidenta del Senado. El debate para actualizarlo puede existir, pero nuestro pasado está ahí, nuestro origen está ahí y lo peor que podríamos hacer es cambiar ese origen porque la gente nos conoce como somos, saben nuestra historia y lo que hicimos por consolidar nuestra democracia.

-En el marco de la conmemoración de los 40 años del golpe el entonces, ex ministro Andrés Chadwick dijo estar arrepentido de haber apoyado una dictadura que violó los DD.HH. Usted fue alcalde designado por el régimen en Los Angeles, ¿se arrepiente también de haber sido parte del régimen?

No. Yo contribuí desde muy joven porque creía que era importante restablecer la democracia en el país, restablecer la normalidad. Pertenecí a una generación que vio la violencia en las calles, a los 17 años en mi primer año de derecho en la Universidad de Concepción el Partido Comunista había asesinado a un dirigente del MIR a las 12 del día en las escalinatas de la facultad y jamás se pudo investigar ese crimen porque la izquierda dijo que a la autonomía universitaria no podía entrar ningún juez. Ése era el país en que yo vivía, donde se destruyó la democracia y obligó a las Fuerzas Armadas a actuar. Ojalá yo no lo hubiera vivido, pero ante esa realidad uno dice: cómo contribuyo para que vuelva a restablecerse el imperio del derecho, y eso hice, por eso no puedo estar arrepentido. Quienes destruyeron el Estado de derecho hoy no asumen ninguna responsabilidad y no saco nada con culparlos con el dedo.

-Con ese tipo de declaraciones, ¿Chadwick se alejó un poco de la UDI?

No, respetamos su postura. Es un gran amigo, ha contribuido mucho en la UDI, hizo un gran trabajo como ministro del Interior y respetamos su visión.

-Andrés Chadwick preside la fundación que defiende el legado del piñerismo. ¿No se lee como un acercamiento al piñerismo? ¿O bajar la cortina en la búsqueda de una figura propia?

Me parece muy bien que exista esta fundación que defienda su obra, porque nosotros participamos bastante en ese gobierno. Pero la figura del ex presidente no se defiende con una fundación sino con que la gente recuerde con cariño su gobierno. Chadwick va a estar en eso y nosotros vamos a contribuir en el debate de la centro derecha y de esa forma trabajar por un candidato propio para las primarias de 2017.

-Pero se habla de que la fundación es también la plataforma para Piñera en 2018.

No le veo ese objetivo. Es otro y se va a cumplir.

Marginados de los debates

-El senador Larraín ha dicho que la derecha no supo leer los cambios de la sociedad y nadó a contracorriente en iniciativas como el AVP y la modificación del binominal. ¿Es una visión correcta? 

A veces es bueno nadar contra la corriente, a veces lo hemos hecho. A veces uno se salva nadando contra la corriente y ayuda a que otros se salven. ¿Por qué perdimos después de haber hecho un gobierno realizador? Ésa es la pregunta que debemos responder durante 2014.

-De otra forma, durante los próximos años van a seguir nadando contra la corriente porque son minoría en ambas Cámaras y sin sus votos se aprobarán gran parte de los proyectos. ¿Lo siente así?

-No es primera vez que tenemos minoría. Yo ingresé a la Cámara de Diputados cuando solo éramos 13. En la reforma tributaria eran 107 a favor y 13 en contra. Por lo tanto, eso no nos asusta, crecimos en ese ambiente. Lo importante es demostrar a la gente que nuestras convicciones la ayudan a mejorar su vida; así nos van a apoyar.

-Se dice que la UDI quedó marginada frente a los debates entorno al cambio al binominal, el AVP, los cambios a la Constitución y la reforma tributaria. ¿Lo comparte?

Nosotros debatimos lo que creemos. No estamos en política para hacer lo que algunos quieren que hagamos y defendemos nuestras convicciones con vehemencia. Incluso en el AVP algunos hemos votado a favor; en el binominal no, pero nadie nos ha dicho cuál es la alternativa. Tenemos que mejorar nuestra acción política para seguir siendo apoyados por la ciudadanía.

-¿No es el momento de Ernesto Silva para dirigir la UDI? Eso dice Edmundo Eluchans apostando por usted.

Espero que la gran mayoría de la UDI tenga esa postura y apueste por mí, pero en un sentido de unidad. Ernesto Silva es muy capaz, pero debemos tener una conversaciones con nuestras bases y revitalizar el partido. Estoy trabajando para ganar.

-¿Qué liderazgos hay hoy dentro del partido para potenciar como figuras? Las más conocidas dieron un paso al costado.

¡Quedan muchas! Tenemos muchos diputados nuevos, que ganaron en zonas muy complejas…

-Pero no rostros que se puedan reconocer que sean líderes, como lo fue Longueira o Matthei.

No es bueno hacer esas comparaciones. Jacqueline Van Rysselbergue ganó en una zona muy difícil, Ena Von Baer, Iván Moreira… el mismo Hernán Larraín o Juan Antonio Coloma. Tenemos muchos dirigentes de primer nivel. Tenemos que recuperar lo que fuimos en la UDI en los 20 años pasados.

-¿Está de acuerdo con ampliar la Alianza a incluir como partidos a Evópoli y Amplitud?

De todas maneras. La coalición debe ser más amplia. Por eso mismo decidimos invitar a nuestro comité UDI a Lily Pérez (ahora independiente tras renunciar a RN) y tenemos que tener la fuerza para construir una Alianza. Para eso necesitamos una UDI potente.

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