Abogada querellante del caso Neltume: "La participación de Rosauro Martínez está sobreacreditada"
Hace unos días fueron los alegatos por la petición de desafuero contra el diputado de RN, a quien se le acusa de participar directamente en la muerte de tres miristas en Neltume. “Es bastante curioso que una persona acusada de hechos tan graves no enfrente a la justicia”, espeta la abogada Magdalena Garcés.
Los testigos acusan a Rosauro Martínez (63)de dirigir y ejecutar el asesinato de tres militantes del MIR en 1981. Lo ven disparando, como un capitán del Ejército con el rostro frío. Un diligente líder de la Operación “Contraguerrilla Machete”, originada para reprimir y asesinar a los guerrilleros de Neltume, en la pre cordillera de Valdivia. Hace cinco años, ya había aparecido la posible vinculación del recién reelecto diputado de RN con la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), debido a que en el 2008, el Ejército entregó a Alejandro Solís, ex Ministro de la Corte de Apelaciones de Santiago, una lista con 1.097 agentes de este aparato represivo, allí se registra el nombre del parlamentario.
Magdalena Garcés, abogada querellante en el caso, habla de la responsabilidad del parlamentario en las muertes en Neltume, caso por el que se ha pedido su desafuero. “En relación a la participación de Martínez la verdad es que nosotros pedimos el desafuero por los hechos de Remeco Alto, porque hay un operativo claro que fue dirigido por él, es ese. Porque hay testigos de su presencia en el lugar y lo indican disparando”, comenta.
Garcés dice que en los alegatos – que en su opinión poco y nada tuvieron de cobertura periodística- se establecieron hechos concretos que terminaron por desencajar a la defensa del diputado por Chillán. Es por eso motivo, en su opinión, que la defensa de Martínez siempre ha recurrido a resquicios legales para dilatar las audiencias.
La abogada comenta que este ha sido un proceso duro, con testigos que aún tienen temor de declarar las atrocidades que presenciaron y que mientras más se aclara la participación del Ejército en estos crímenes, más esquiva se vuelve la información. Pero explica que los testimonios que ya existen son muy contundentes y se muestra optimista para el próximo alegato (que podría ser el 5 de mayo). Allí la Corte determinará si existen sospechas fundadas de la participación del diputado en los crímenes de la Operación Machete. “Nosotros creemos está sobre acreditada su participación y por lo tanto se le puede perseguir judicialmente, esperemos pueda ser objeto de persecución penal dentro del proceso de Neltume”, dice.
-¿A qué se debió el atraso de la audiencia con nueva fecha para el cinco de mayo?
La defensa durante los alegatos hizo reclamaciones respecto, según ellos a la inhabilidad afectaría a una de las ministras que era Ruby Alvear, inhabilidad que para nosotros no correspondía, además lo hicieron de una manera muy poco elegante con la ministra allí presente. El tema es que la ministra Ruby Alvear ha sido reemplazante en la causa Neltume, ha reemplazado a la jueza Ema Díaz, pero la verdad es que ha dictado sólo resoluciones de mero trámite, que a nuestro juicio no la inhabilitan para los alegatos de un desafuero. Ahora, el tema es que para nosotros, esto no fue un revés ni un gran problema, porque esto iba seguir siendo planteado en la Corte Suprema, mejor que fuera ahora. La verdad es que ante cualquier riesgo futuro para nosotros, es mejor que se solucione cuanto antes.
-¿Es el caso se Rosauro Martínez un ejemplo de la ardua tarea que significa conseguir que se juzgue a altas autoridades, ya sean civiles o parte de la plana mayor de Ejército?
Creo que hay que recordar que si bien Pinochet no fue condenado finalmente fue procesado, nosotros acá, en el caso de Rosauro Martínez, nos encontramos con un señor que durante todo el periodo de transición a la democracia ha sido diputado, que hasta el momento, sus crímenes aparecían encubiertos porque no se habían investigado. Finalmente se logra esclarecer algo de la situación relativa en Neltume, en especial del suceso de Remeco Alto y van apareciendo sus responsabilidades. En ese sentido, creo que el tema importante es el tema de quienes fueron relevantes personas del Ejército que después hicieron vida de civil, no es fácil lograr que se les investigue, como pasó con Cheyre en su momento.
-¿Qué se espera que suceda en la nueva fecha de los alegatos del desafuero?
Nosotros estamos muy tranquilos en el sentido que los antecedentes son contundentes en relación a la participación que le cabría a Rosauro Martínez en los hechos. El desafuero no es un juicio, esto es un procedimiento de desafuero en que se hace un antejuicio en el sentido en que la Corte tiene que ver si existen sospechas fundadas de participación, algo que nosotros creemos está sobre acreditada y por lo tanto se le puede perseguir judicialmente y esperemos pueda ser objeto de persecución penal dentro del proceso de Neltume.
-Además han aparecido nuevos testimonios de ex conscriptos…
Sí han aparecido nuevos testigos, pero además estos hechos nunca se habían investigado, es una causa que partió el 2003 cuando un juez del crimen logró investigar un poco y posteriormente se reabre el 2010 por una querella del subsecretario del interior Patricio Rosende y estos hechos comienzan a ser investigados, cuando aún no se habían establecido las responsabilidades. En relación a soldados conscriptos están apareciendo algunas de las declaraciones, sin embargo, nosotros constatamos que aún hay mucho miedo de quienes fueron soldados conscriptos y en especial los que pertenecieron a la Compañía Comando Número ocho dirigida por el señor Rosauro Martínez Labbé.
-¿Los hechos más graves guardan relación con las tres muertes ocurridas al entrar en la casa de Floridema Jaramillo?
Hay varios hechos graves que acompañan la causa, ahora en relación a la participación de Martínez, la verdad es que nosotros pedimos el desafuero por los hechos de Remeco Alto porque hay un operativo que fue dirigido por él, eso está claro. Porque hay testigos presenciales en el lugar que lo indican disparando, porque comanda este operativo donde hay procesadas otras personas. Esta causa tiene como procesados a dos personajes bastantes siniestros de la CNI, pero que de los antecedentes que van surgiendo, parece cada vez más clara la responsabilidad del Ejército en el sentido que los operativos de Neltume, fueron operativos dirigidos por esta institución, más la participación del personal del CNI y de Carabineros.
-Y en esa inmensa fuerza represiva que se desplegó en los crímenes de Neltume. ¿De qué instituciones proviene el mayor hermetismo?
En parte las dificultades de este tipo de investigaciones, están ocurriendo treinta años después, donde los testigos directos, todavía tienen terror de declarar lo que vieron, donde en organizaciones como la CNI existen profundos pactos de silencio. Donde tampoco el Ejército se ha caracterizado por entregar información, los oficiales que han sido interrogados no han querido colaborar. Por otra parte porque falta investigación. Se ha avanzado mucho, pero todavía falta por hacer.
-El diputado Rosauro Martínez ha sido hábil en la dilatación de los plazos…
Creo que efectivamente como su defensa no tiene mayores argumentaciones en el sentido de que no puede negar su participación en estos hechos, usa dos mecanismos de defensa: uno son los mecanismos de dilatación para generar algún tipo de nulidades; otro donde se trata de argumentar defensas de fondo que no tienen que ver con desafuero o la prescripción de los hechos. Finalmente, creo que es bastante curioso que en un país una persona acusada de hechos tan graves como estos no enfrente a la justicia.