Greenpeace aplaude el fin de HidroAysén y plantea alternativas con energías limpias
“Chile cuenta hoy con una oportunidad única para potenciar sus energías renovables, el ahorro energético e impulsar proyectos de bajo impacto en el medio ambiente y las personas. Decidir entre represas o termoeléctricas es una falacia enorme que esconde la verdad", dijo Matías Asún.
El proyecto Hidroaysén tal como fue conocido ha muerto. Y la sociedad civil celebra. La votación unánime del comité de ministros encargado de revisar las reclamaciones contra Hidroaysen ocurrida en la mañana de este martes finalmente rechazó el permiso ambiental solicitado por Hidroaysén.
Para Greenpeace “este es el triunfo ciudadano de esas miles de personas que salieron a las calles a manifestar su oposición al proyecto. La muerte de Hidroaysén es la victoria de la sociedad civil empoderada que alzó la voz durante más de 10 años para finalmente lograr sepultar el mega proyecto”.
Matías Asún, Director de Greenpeace en Chile, destacó que para la organización “es una satisfacción enorme haber sido parte de este enorme triunfo ciudadano que pertenece a todos los que estuvimos trabajando, marchando, participando con nuestra voz para impedir esas represas en la Patagonia. La fuerza de un pueblo da frutos, la voz de las personas, de los ciudadanos finalmente se ha impuesto. Esta es la victoria de la fuerza del movimiento ciudadano que protege nuestra Patagonia Chilena. En Greenpeace estamos defendiendo la Patagonia hace más de 11 años cuando en 2003 se quiso instalar el proyecto “Alumysa” y lo detuvimos. Hoy volvemos a celebrar”.
La organización ambientalista subrayó que este fallo es la antesala al rechazo a proyectos contaminantes y una invitación a fomentar la viabilidad de la de energías renovables no convencionales en Chile.
“Hidroaysén le cambió la cara a Chile. Lo que ocurrió hoy es uno de los mayores triunfos ambientales de la década pues ha sido la gente la que impuso el cuidado del medio ambiente sobre la ambición de unos pocos. Esta es la prueba de que actuando juntos podemos cambiar la historia y construir otros caminos de desarrollo”, recalcó Asún.
El Proyecto Hidroaysén de las empresas Endesa y Colbún, que pretendía construir cinco mega represas en las cuencas de los ríos Baker y Pascua en la Patagonia Chilena, recibió múltiples críticas como resultado de los diversos impactos que tendrían éstas sobre el patrimonio ambiental de esa prístina zona, abriendo con ello un intenso debate ciudadano sobre la matriz energética.
“Chile cuenta hoy con una oportunidad única para potenciar sus energías renovables, el ahorro energético e impulsar proyectos de bajo impacto en el medio ambiente y las personas. Decidir entre represas o termoeléctricas es una falacia enorme que esconde la verdad. Las oportunidades existen y debemos caminar de forma decidida hacia una matriz limpia, renovable y propia”, sentenció el timonel de la ONG.