La fuga de jefes que complica a La Red

Los últimos tres meses han sido movidos al interior de La Red. Varios equipos de producción del canal se están rearmando, entre despidos, renuncias y movimientos de la “grúa” de la industria televisiva, que principalmente ha llevado a varios de sus ex colaboradores hacia Mega. La dimisión de profesionales incluye a Jorge Gómez (productor ejecutivo de Vigilantes), Marcelo Saavedra (productor ejecutivo de Vigilantes); Roberto Cisternas (director de Mentiras Verdaderas), Carolina Palma (Mañaneros), Carolina Salineros (productora general de Mentiras Verdaderas), Cristián Herrera (editor Mentiras Verdaderas), entre otros.

Según versiones de varios renunciados, los alejamientos de la señal privada son consecuencia del nuevo estilo de la subgerencia de Contenidos y la de Producción -lideradas por Ingrid Garcés y Verónica Mendoza, respectivamente-, quienes -aseguran los consultados- han puesto énfasis en la farándula como forma de obtener rating. “Vienen desde el mundo de la farándula y se mueven con los números y el ráting desde otra perspectiva”, dicen.

La gestión de Mendoza y Garcés es comparada con la de Natalia Freire, quien fue gerenta de Contenidos y Producción hasta fines de enero cuando presentó su renuncia al director de la estación, Javier Urrutia, por diferencias editoriales. De acuerdo a varias fuentes, el trabajo de Freire fue muy valorado por los colaboradores del canal, puesto que apuntaba a una pauta propia centrada en temas que otros canales no tocan, como los relacionados a los derechos humanos y denuncias laborales.

“Hoy el canal perdió la visión que tuvo en algún momento. Es un déjà vu constante donde los mismos temas se repiten en los mismos programas todos los días, además con los mismos rostros”, dice un ex colaborador. “Te levantas con Salfate y te acuestas con Salfate. Lo mismo con Eduardo de la Iglesia”, dice otra.

Al interior de La Red desconocen tal cantidad de renuncias -sólo reconocen tres salidas-  y explican que ellas responden a un movimiento natural de la industria televisiva donde suele operar la grúa de los canales más grande, en este caso de Mega a dónde han recalado varios de los renunciados y despedidos. De hecho, la periodista Margarita Hantke tiene una oferta de esa estación y por estos días negocia su eventual salida de La Red.

La versión del canal difiere de la que tienen los ex trabajadores. Una fuente habla de una crisis en los equipos y dice que esta responde a  “un cansancio por las presiones constantes de Garcés y Mendoza para subir el ráting”, enviando correos y mensajes por WhatsApp mientras los programas están al aire o contradiciendo las instrucciones del día anterior, algo que sucede en todos los canales “pero que en este caso se hizo insostenible”.

“Falta alguien que pare la pelota, que sepa de tele, como lo hacía la Natalia. Esto tiene que ver con una poca visión a largo plazo; hay que tener una visión más clara más allá del día a día al calor del ráting online”, dice una ex funcionaria.

Los últimos dos años han significado un aumento de rating del canal privado. Llegó a promediar 4 puntos en el prime time, incluso se han conseguido 10 puntos en capítulos especiales de Mentiras Verdaderas, programa ancla de la señal. Pero al interior del canal concuerdan que la programación de los canales más grandes -sobre todo Mega con su teleserie hit “Las mil y una noches”- han empañado las buenas cifras, haciéndoles descender un punto (y a veces dos) durante la franja nocturna.

Investigación de la Fiscalía

Meses atrás, el canal privado junto a Iberoamericana Radio Chile (Radio ADN Chile, Rock & Pop, Activa, y otras) firmaron un acuerdo comercial para fusionar la oferta publicitaria a través de la creación de una agencia de medios denominada Multimedios GLP. Debido a que el consorcio radial tiene una participación relevante en el mercado de la radiodifusión, la Fiscalía Nacional Económica (FNE) inició una investigación para determinar si esto atentaba de alguna manera a la libre competencia.

Si bien el Tribunal De Libre Competencia (TDLC) descartó que, hasta el momento, la información pública disponible sobre los alcances del acuerdo entre ambas empresas sea suficiente para evaluar los riesgos anticompetitivos que pueda implicar, el organismo determinó que es un proceso que “corresponde analizar”. Hoy la investigación fue archivada por fiscalía, sin embargo, el texto advierte que estarán atentos al funcionamiento de la agencia y sus implicancia para el mercado del financiamiento de los medios de comunicación.