Cosas que sería bueno copiar: Alemania promueve sus proyectos de ERNC como atracciones turísticas
Uno de los atractivos contenidos en la guía creada en ese país, es la cúpula de cristal del Reichstag, un imán turístico en Berlín que contiene un cono cubierto de 360 placas de espejos que reflejan la luz del sol e iluminan el salón.
En medio del debate por la crisis energética mundial y cuando expertos de todo el mundo plantean la conveniencia de volcarse a potenciar proyectos sobre la base de Energías Renovables no Convencionales (ERNC), en Alemania iniciaron un inédito proyecto que busca acercar a la ciudadanía estas formas de generación de energía.
Con ese objetivo están promocionando las energías renovables como atracciones turísticas y elaboraron una guía que enumera unos 200 proyectos verdes. “Vale la pena el desvío”, dice que invitación a conocer las iniciativas contenidas en el libro que va en su segunda edición y que promueve una agencia especializada en el tema sustentable.
La guía considera en entre los atractivos turísticos la planta de energía nuclear de Kalkar, que debido a la oposición local jamás pudo entrar en operación y hoy simboliza un triunfo ciudadano contra la generación contaminante. La planta hoy recibe medio millón de visitas al año y en ella es posible encontrar hoteles, restaurantes y todo tipo de servicios.
Uno de los atractivos contenidos en la guía, es la cúpula de cristal del Reichstag, un imán turístico en Berlín que contiene un cono cubierto de 360 placas de espejos que reflejan la luz del sol e iluminan el salón.
El Reichstag también cuenta con una serie de paneles solares, y la mitad de su electricidad y la mayor parte de su calor proviene de dos generadores de calor y energía combinados debajo del edificio, que funciona con bio-diesel.
En Baja Sajonia está el parque eólico Holtriem. Según consigna The Guardian, era el más grande de Europa cuando fue construido, con una capacidad total de 90 MW. Tiene una plataforma de observación en una de las turbinas de 65 metros sobre el suelo. Éste ofrece a los turistas – si están dispuestos a subir los 297 escalones hasta la cima – una vista impresionante del mar del Norte y, cuando hace buen tiempo, a las islas de Frisia Oriental.
También en Baja Sajonia está Juehnde, el primer pueblo alemán con autosuficiencia energética.