Armando Alanís Pulido, creador de Acción Poética: "Sin poesía no hay ciudad"
Hace 18 años, el poeta mexicano comenzó a pintar bardas y muros en su Monterrey natal. La idea era llevar fragmentos poéticos a la calle para incentivar la falta de lectura en la gente. Hoy el movimiento funciona en más de 28 países, siendo los chilenos entusiastas seguidores.
En 1996, el poeta mexicano Armando Alanís Pulido decidió que no bastaba con publicar libros o participar en suntuosos seminarios sino que había que sacar ese arte a las calles de su ciudad natal. Probó diversas fórmulas, como pegar versos en cajeros automáticos o entregar ‘flyers’ en los cruceros, hasta que se le ocurrió utilizar el mismo espacio que usaban la publicidad y la propaganda política, y pintar en las bardas y muros de Monterrey versos de amor, creando así un “oasis” en medio de la vida gris y violenta del norte de México. Nacía el movimiento Acción Poética, que en estos 18 años se ha expandido por el mundo y ha llegado a más de 28 países, con rayados en gran parte de Latinoamérica, España e Italia.
“Actualmente no hay una cultura de leer y el movimiento surge como una forma de que la poesía llegue a más gente, de aprovechar el espacio urbano para pintar versos amorosos”, dice. Agrega que este fin de semana pintó cuatro muros más en Monterrey y ya lleva más de 7 mil en toda la ciudad. Y si bien al principio era por las buenas o por las malas, ahora lo llaman para que vaya a pintar los muros de las “colonias”.
“La poesía nos salvará de todo, estoy convencido de eso”, añade a modo de declaración de principios este profesor universitario, escritor y promotor cultural que ha hecho del verso corto una forma de vida. “Le dedico mucho tiempo a la poesía en mi vida, la escribo , la estudio , la publico, la comparto. Pienso que vivir poéticamente es un acto a gran escala, que convivir con la poesía es crecer a gran escala”.
Y sin duda que su proyecto a crecido a gran escala, sobretodo tras la masificación de Internet y las redes sociales. Actualmente el sitio web de Acción Poética tiene más de 50 mil seguidores, donde casi diariamente recibe fotografías de alguna “pintada”, y donde sólo hay que seguir tres reglas claras: deben ser fragmentos poéticos -de factura propia o de poetas reconocidos-, letras de canciones o frases optimistas, pero evitando alusiones políticas o religiosas; las letras deben negras sobre un fondo blanco; y la pintada debe llevar la firma “acción poética” más el lugar de procedencia del colectivo que lo escribió.
“La gente lo hace de buena fe, con corazón y con mucho entusiasmo”, afirma Alanís, para quien lo fundamental es que sea en la calle el lugar donde se desarrolle el primer acercamiento poético, y que quien lea estos fragmentos se incentive para continuar una evolución como lector. “Aquí el que cuenta es el muro real, más que el muro virtual”.
Entre sus seguidores más entusiastas están los chilenos, quienes desde hace algunos años han llenado de “acciones poéticas” las ciudades del país. De hecho Alanís ha venido un par de veces a Chile y dice admirar a varios poetas nacionales. “Los poetas chilenos me parecen poetas a gran escala. Pablo Neruda, Vicente Huidobro, Gonzalo Rojas, Nicanor Parra y Zurita son para mi de cabecera”, añade, y señala que en sus últimas pintadas está homenajeando a grandes escritores como Octavio Paz, Julio Cortázar y Nicanor.
“Estoy felizmente asustado por lo que ha sucedido, ya que siento que ahora la poesía tiene un lugar, o más bien se apropió de un lugar en la ciudad. Siempre digo que sin poesía no hay ciudad. Y vamos por más, porque la poesía nos salvará de todo , yo estoy convencido de eso”.