¿Quién ganó con el round Peñailillo-Piñera?
El Dínamo conversó con 4 analistas políticos sobre la polémica entre el ministro del Interior y el ex presidente y éstas con las conclusiones a las que llegaron sobre quién cae de pie en esta disputa mediática.
Este jueves, el ex presidente Sebastián Piñera volvió a aparecer públicamente criticando a la Presidenta Michelle Bachelet y las reformas que hoy lleva adelante en su gobierno, haciendo especial énfasis en la educacional y tributaria. La catarsis de Piñera incluyó una “invitación” a repensar las reformas y una profunda crítica al crecimiento del país.
Inmediatamente, el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, salió a responder al ex mandatario recordando el “legado” del empresariado en su paso por La Moneda y pidiéndole que “tenga tino y prudencia, que se comporte como ex presidente”. “No se deje llevar por la ansiedad de candidato presidencial. Yo creo que todos los chilenos esperan de un ex Presidente que se comporte como ex Presidente y que eso esté por sobre su comportamiento como precandidato presidencial”, dijo el jefe de gabinete.
Los analistas coinciden en que el rol de un ex presidente de la República es mantenerse lejos de la coyuntura y que hacer este tipo de intervenciones es un riesgo al capital político, en miras hacia a una eventual candidatura presidencial. En ese sentido, hay quienes ven positivamente la respuesta de Peñailillo y otros que observan una sobredimensión de las declaraciones, teniendo en cuenta que son varias las autoridades que salieron a responder al ex jefe de Estado.
El Dínamo conversó con cuatro analistas políticos sobre esta polémica: Claudio Fuentes, director del Instituto de Investigación en Ciencias Sociales de la UDP; José Francisco “Cheche” García, analista de Libertad y Desarrollo; Gonzalo Müller, cientista político de la Universidad del Desarrollo; y Cristóbal Aninat, director del magíster de Políticas Públicas de la UDP. Éstas son las conclusiones a las que llegaron.
Round 1
La embestida de Piñera es vista desde distintos ángulos pero general es criticado el rol que tiene como ex presidente. “Debe estar alejado de estas polémicas, pero entiendo que desde la centroderecha hay sectores que lo tironean para que tenga una presencia más activa en un gobierno que está intentando refundar Chile. Es un capital político importante para su sector. Sin embargo, ése no es su rol”, dice García.
Gonzalo Müller asegura que Piñera no dijo nada distinto a las críticas ya deslizadas desde varios sectores al interior de la Nueva Mayoría, incluyendo a Ignacio Walker, Andrés Velasco y al ex presidente Ricardo Lagos Escobar. “Fue un error político del ministro Peñailillo porque sus declaraciones lo que hicieron fue instalar a Piñera como candidato, algo que ni el CEP logró hacer”, dice y agrega que su tarea era disminuir la crítica y no magnificarla.
Destemplada, desatinada y una estrategia mal pensada. Ése es el análisis de Cristóbal Aninat. El analista electoral explica que, si lo que Piñera busca es posicionarse como candidato, debe hacerlo desde las bases de la Alianza, “construir un apoyo silencioso en su sector”.
En ese sentido, otro analista fuera de micrófono concuerda en ese error y en que “fue una falta de respeto”, sobre todo porque este gobierno “ha sido muy pacífico” contra la administración anterior “a diferencia de lo que hizo Piñera”. “Se está echando todo el gobierno encima y Piñera no tiene mucha gente que lo defienda… incluso la UDI quiere que le vaya mal”, dijo.
La crítica es compartida por Claudio Fuentes: “Piñera no queda bien posicionado en la Alianza porque ahí hay una disputa de poder, con intereses presidenciales, sobre todo en su intento de mantenerse como protagonista, líder y un actor clave dentro de la Oposición”.
Round 2
El golpe en la mesa de Peñailillo es visto positivamente desde el sector más oficialista y cuestionan que el mismo Piñera fue quien “dio pie para basurearlo”, por parte de un ministro que hoy está más “sereno y validado” políticamente. Sin embargo, hay posturas contrarias.
“Cheche” García apuesta por una estrategia del ministro del Interior por “tomar las riendas para demostrar que es capaz de conducir el gabinete”, en medio de las críticas a las reformas políticas y sobre todo en un espacio donde hay rumores de un cambio de gabinete para finales de septiembre.
“Cuando te arrinconan de esa manera, lo obvio es salir a reaccionar de manera enérgica y Peñailillo se ha caracterizado por tener las ideas muy claras. Lo que dijo ayer contra Piñera es todo lo que el mundo piensa de él”, dice otro. En eso último concuerda Aninat: “Son las verdades que todos sabemos”.
Fuentes y Müller coinciden en que hubo un exceso de respuestas por parte del Gobierno. No solo Peñailillo cuestionó al ex jefe de Estado; también lo hicieron el vocero Álvaro Elizalde, el ministro de Justicia, José Antonio Gómez, y el presidente del PS, Osvaldo Andrade, entre otros. “Se está sobredimensionando una declaración de un ex presidente… Yo optaría por una sola declaración concisa y no darle más revuelo”, dice el académico de la UDP.
“Sólo falta que le conteste Bachelet”, dice Gonzalo Müller. “Es un error político la respuesta de Peñailillo porque solo logra engrandecer a Piñera y lo transforma en un líder, en alguien que su opinión no puede no ser contestada y desde lo más alto del Gobierno. Yo creo que Piñera nunca se pasó por la mente que sería alguien como Peñailillo quien iba a salir a contestarle y cómo le contestó”, concluye.
Round 3
La temprana carrera presidencial. Pese a que solo han pasado 6 meses del nuevo Gobierno, ya van al menos 30 nombres que suenan como eventuales competidores para los nuevos comicios para llegar a La Moneda, entre ellos Piñera, Peñailillo y los senadores RN Andrés Allamand y Manuel José Ossandón. Estos últimos dos salieron posicionados positivamente en la encuesta CEP, a un lado del ex jefe de Estado, e incluso mejor.
En ese sentido, los analistas en general coinciden en que la estrategia elegida por Piñera es mala porque genera más ruidos al interior de la Alianza, donde ni siquiera ha logrado tener un apoyo contundente de sus correligionarios. “Al interior de ese bloque hay una disputa de liderazgos muy fuerte, sobre todo en RN; por lo tanto, genera ruidos internos que son negativos para sus aspiraciones”, dice Claudio Fuentes.
Otro analista de la Nueva Mayoría dice que la estrategia electoral de Piñera debiera ser consolidar la base y luego ir hacia los votantes “blandos”, pero que en este momento “se está abriendo un flanco grande por otros lados antes de tener apoyo incluso desde su propio sector. Es al revés de cómo se hacen las cosas en política”, dice.
García dice que la ganancia de su irrupción crítica contra Bachelet es discutible. “A las personas no les gustan los conflictos, entonces arriesga su capital político. Hoy estamos antes proyectos de sociedad diferente; en ese sentido, se entiende que intervenga… pero un ex presidente debe estar por sobre todo eso”.
Round 4
Andrés Velasco tampoco quiso pasar desapercibido y salió a criticar a Piñera diciendo que el ex presidente no impulsó ninguna reforma estructural y que su arremetida responde a intereses personales y no a su preocupación por los chilenos. De esta forma, el ex ministro de Hacienda dejó atrás su enfrentamiento mediático con Marco Enríquez Ominami, con quien aparece enfrentado en las encuestas como cartas presidenciales de la centro izquierda y pasó a medirse a través de la prensa con un ex presidente.
Según Gonzalo Müller, el ex ministro de Hacienda había logrado en este tiempo aprovechar la tensión por las reformas del Ejecutivo y “ocuparlas en beneficio propio”. “De alguna forma sintió la amenaza de que Piñera se metiera en su espacio como crítico”, por lo que habría salido a golpearlo también.
En tanto, un analista de la Nueva Mayoría dice que la alternativa de Velasco es construir un camino que le haga frente a la “errática estrategia” de Piñera.
Claudio Fuentes en esto es más cauto y dice que este tipo de estrategias es para candidatos que quieren marcar agenda en un momento preciso. Pero sostiene que no es acertado salir a enfrentar a un ex mandatario en el área chica cuando aún quedan 3 años por delante para la siguiente campaña. “No tiene mucha trascendencia y se va a olvidar”, dice.