Vuelve Axel Kaiser: "Bachelet destruye los pilares del libre mercado en Chile"

El director ejecutivo de la Fundación para el Progreso, Axel Kaiser, sin duda no le teme a la polémica. En una columna para El Mercurio, en junio de 2013, se ganó el odio de los tuiteros al afirmar que la educación “no era un derecho”.

Ahora, Kaiser aprovecha las páginas de la afamada revista económica Forbes para afirmar que el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet está  “arrasando con la institucionalidad del libre mercado” en nuestro país.

El columnista parte recordando que Milton Friedman, el “gurú” del neoliberalismo y padre ideológico del modelo chileno, señalaba en los ’80 que la libertad económica era incompatible con el autoritarismo, por lo que aconsejaba que Chile volviera a la democracia. Sin embargo, temía que tras la dictadura, los políticos podían volver a incrementar el tamaño del gobierno, disminuyendo así dichas libertades económicas. “25 años después, las preocupaciones de Friedman parecen haberse vuelto realidad“, anota Kaiser.

Agrega que a 5 meses de asumir el gobierno socialista de Bachelet, el crecimiento se ha derrumbado, y que la principal causa de ésto es “el plan gubernamental de hacer “tabla rasa” con las instituciones de libre mercado que habían permitido a Chile convertirse en el país más próspero de América Latina”.

Entre los elementos del “radical programa socialista” de la mandataria se encontraría la reforma tributaria -“que aumentará drásticamente el impuesto a las empresas, dejándolo encima de la media de la OCDE”- y la reforma al sistema previsional, que en la columna es considerado como “un factor decisivo del crecimiento económico y la creación de empleos en Chile”, a través de la acumulación de capital hecha por las AFPs. Pero el actual gobierno “está decidido a traer de vuelta al Estado al negocio de la seguridad social”, afirma el autor, al hablar de la idea de una AFP estatal, que a su juicio es “una amenaza existencial a la más importante de las reformas de libre mercado hechas en el país en los ’80”.

Kaiser incluye en su sombrío panorama las reformas al sistema de salud, a la legislación laboral, a la educación y a la Constitución, subrayando las palabras del ex presidente Ricardo Lagos respecto a que una nueva Carta Magna debía empezarse “desde cero”. Un modelo donde, según el columnista, “el gobierno se convertiría en el conductor central del progreso social y económico“, algo que Chile “ya había probado desde la década de 1930 en adelante y que terminó desastrosamente en 1973″.

Junto con recordar que la presidenta Bachelet dijo compartir las metas de Salvador Allende, el director ejecutivo de la Fundación para el Progreso, finaliza diciendo: “A diferencia de Allende, la señora Bachelet no está tratando de convertir a Chile en un régimen comunista. Pero no es ningún secreto que en gran medida ella suscribe una antigua filosofía estatista. Y no hay duda de que si su administración se sale con su proyecto, Chile dejará de ser un modelo para América Latina. Queda por ver si los que quieren preservar la senda del progreso seguido por Chile en las últimas décadas podrán salvar al país de un tipo argentino de desarrollo institucional. Por el momento, el futuro se ve bastante sombrío.”