Nueva ley antiterrorista permitirá a Australia vigilar Internet
Con la ley, la Organización Australiana de Seguridad e Inteligencia (ASIO, sigla en inglés) podrá con una sola orden genérica buscar, vigilar, copias, borrar o modificar datos en los ordenadores o acceder a un ordenador que es parte de una red a través de terceros.
El Parlamento australiano concedió hoy mayores poderes a sus servicios secretos para vigilar internet, al aprobar el primero de tres tramos que comprende un amplio paquete legislativo para luchar contra el terrorismo.
La polémica Ley de Enmiendas a la Legislación sobre Seguridad Nacional fue aprobada hoy en la Cámara de Representantes, tras recibir el jueves pasado el visto bueno del Senado en Camberra.
“La prioridad del Gobierno es mantener a Australia a salvo”, comentó el ministro australiano de Justicia, Michael Keenan, al defender las leyes, que fueron criticadas durante el debate de hoy por los representantes del Partido Verde, dos legisladores independientes e incluso una del Partido Laborista.
Para el Gobierno del primer ministro conservador, Tony Abbott, esta importante actualización de las leyes de seguridad realizada en el país desde la década de 1970, permitirá a los responsables de la seguridad obtener los poderes y capacidades necesarias para desempeñar su labor en una “nueva era de peligro”.
Con la ley, la Organización Australiana de Seguridad e Inteligencia (ASIO, sigla en inglés) podrá con una sola orden genérica buscar, vigilar, copias, borrar o modificar datos en los ordenadores o acceder a un ordenador que es parte de una red a través de terceros.
“ASIO tendrá acceso a todo internet y podrá vigilar la actividad de todos los australianos en cualquier momento, ya sea a través de sus cuentas de Twitter, Facebook, las páginas que visiten, las comunicaciones con otras personas, todo”, declaró recientemente el portavoz de la Alianza de Abogados de Australia, Greg Barns.
Las enmiendas aprobadas hoy también permiten sancionar a las personas, entre ellas informantes y periodistas, que revelen operaciones especiales de inteligencia hasta con diez años de prisión, además de otorgar inmunidad limitada a los agentes secretos que participen en operaciones especiales.
Este mes un comité parlamentario de Inteligencia y Seguridad analizará un segundo paquete de disposiciones referidas a los australianos que se unen a las milicias yihadistas en el extranjero, mientras otra ley vinculada a la recolección de metadata será abordada a finales de año.
Australia elevó el mes pasado la alerta terrorista al nivel “alto” ante la amenaza de atentados en medio de la ofensiva internacional contra el Estado Islámico en Siria e Irak, en la que Canberra participa con ayuda humanitaria y armas.