Toma nota: los 9 problemas que impiden el placer sexual
Expertos del Instituto de Medicina Sexual de Madrid dieron a conocer cuáles son los enemigos principales que impiden tener una relación sexual satisfactoria, tanto en hombres como mujeres.
Las relaciones sexuales siempre son motivos de goce, placer y satisfacción. Sin embargo, existen problemas que pueden impedir que esto ocurra. Los expertos del Instituto de Medicina Sexual de Madrid, Rosa Abenoza y Manuel Fernández Arjona, dieron a conocer cuáles son los nueve problemas que impiden tener una relación sexual satisfactoria, tanto en hombres como mujeres, según publicó Efe Salud.
1. Anorgasmia coital: Es la incapacidad de llegar al orgasmo durante el coito. “Hay un alto porcentaje de mujeres afectadas, bien sea por la falta de buen acoplamiento con la pareja o porque no haya una buena estimulación del clítoris”, señala la sexóloga Abenoza.
Ante esto, existen dos tipos de anorgasmia: La primaria es la que afecta a la mujer desde siempre. La secundaria: se da en mujeres que no pueden tener orgasmos por pérdida de excitación, bloqueo, ansiedad, etc.
La anorgasmia suele darse en mujeres jóvenes por falta de conocimiento o poca experiencia, así como en mujeres mayores de 45 años.
“La sequedad vaginal de la menopausia está asociada a una relación sexual más dolorosa, menos sensitiva y con mayor dificultad para alcanzar el orgasmo”, matiza el urólogo Manuel Fernández Arjona. Los medicamentos no son el método para solucionar esta disfunción, sino con técnicas conductuales.
2. Falta de deseo sexual: También conocido como deseo sexual hipoactivo. “La mujer pierde el interés por la relación sexual, muchas veces motivada por la edad, el paso del tiempo o la propia pareja”, explica el Fernández. “Suele darse en mujeres menopáusicas o bien en etapa de crianza, o con otro tipo de problemática como un estado depresivo”, detalla Abenoza.
El tratamiento consiste en realizar un análisis para evaluar el estado general de la persona y una entrevista para detectar posibles problemas psicológicos que puedan causar la falta de líbido. Las disfunciones sexuales a menudo se deben a un problema de adaptación y entendimiento dentro de la pareja.
3. Vaginismo: La doctora Abenoza lo define como “contracción refleja e involuntaria de la musculatura de la entrada vaginal que impide la penetración”. Puede aparecer a partir de un momento de la vida como un parto, una mala relación de pareja o una agresión sexual. Es un mecanismo de defensa inconsciente.
Los especialistas deben asesorar y hacer una evaluación psicológica de las vivencias de la mujer para que gane confianza en sí misma y en la pareja.
4. Dispareunia: El también llamado “coito doloroso” es frecuente en quienes han pasado por algún parto, y sobre todo en mujeres menopáusicas. La mucosa se atrofia, se puede abrir “como cuando se nos cortan los labios” y aparecen pequeñas heridas, lo que causa molestias en la relación sexual.
“El objetivo es evitar la sequedad de la mucosa con lubricantes para adaptar una buena respuesta sexual”, subraya.
5. Disfunción eréctil: Más conocida como impotencia. Afecta sobre todo a los mayores de 50 años, pero puede aparecer en cualquier franja de edad. “Una causa fundamental es el envejecimiento: el organismo no funciona como cuando somos más jóvenes”, puntualiza el urólogo Fernández Arjona. También puede influir el componente genético.
Algunas enfermedades pueden ser la causa de la impotencia. “La hipertensión provoca un deterioro de las arterias del pene” y los fármacos que tomamos contra ella pueden resultar perjudiciales. Además, la cirugía para tratar el cáncer de próstata en muchas ocasiones conlleva este problema sexual.
Fernández Arjona subraya de que existe tratamiento para este problema. Hay fármacos de todo tipo: orales, inyecciones intracavernosas, geles que se aplican en el miembro, ondas de choque para regenerar el tejido cavernoso y cirugía de prótesis de pene.
6. Eyaculación precoz: Está relacionada con el grado de “excitabilidad de un sujeto en su relación sexual” y suele asociarse a los hombres de entre 20 y 30 años. “Estos pacientes eyaculan de una forma mucho más rápida de lo deseable, tienen una relación sexual breve”, precisa el doctor.
Aunque las causas son psicológicas y no orgánicas, la paroxetina es un fármaco que permite suavizar la contracción de los conductos deferentes –por donde pasan los espermatozoides–, relacionados con la eyaculación y el orgasmo.
7. Curvatura del pene: Este problema es desconocido pero muy frecuente como la diabetes. “El que tiene una curvatura de 20 grados no viene a consulta porque sí puede tener una relación satisfactoria. Suele acudir el de 90 grados o algo menos”. Las causas exactas de esta disfunción se desconocen. Para solucionarlo, se requiere cirugía.
“La cirugía de la curvatura suele ser larga y compleja porque puede implicar que haya que desmontar el pene entero empleando parches”, señala Martínez Arjona. Los antiinflamatorios son útiles para tratar el dolor, pero no reducen la curva del miembro.
8. Eyaculación retardada: Hay hombres que son incapaces de eyacular durante una relación sexual o lo hacen muy tarde. La pérdida de sensibilidad de personas más mayores también puede asociarse a esta disfunción. Según la doctora Abenoza, existen apoyos farmacológicos que unidos a una terapia conductual pueden acelerar un poco la respuesta.
“Hay que lograr que el propio varón vaya dándose cuenta de cómo responde a los estímulos y detecte si realiza algún bloqueo corporal”, sugiere la sexóloga y psicoterapeuta.
9. Erecciones nocturnas dolorosas: Hay hombres que se despiertan en mitad de la noche con una erección dolorosa y prolongada. “No sabemos muy bien por qué se produce y no existe un tratamiento eficaz para este tipo de patologías”, advierte Fernández.