Monsanto dice que nueva ley de obtentores vegetales no los impactará, mira por qué

El gerente general de Monsanto Chile, José Ignacio Salazar, abordó el proyecto de ley de UPOV 91, que ingresará el Gobierno en los próximos meses, en reemplazo del UPOV-78, subrayando que tal como planteó a principio de año, haber retirado el proyecto de ley de obtentores vegetales les pareció una medida acertada, dado que la discusión había llegado a un punto muerto.

“Hay mucha información alejada de la realidad, y nosotros no fuimos lo suficientemente activos como industria, no sólo como Monsanto, para tener un rol de educar en cuanto al quehacer de la agricultura y la biotecnología”, dijo el personero en diálogo con ADN Radio Chile. y luego manifestó que “con una sociedad mucho más empoderada, con redes sociales y diversas técnicas de comunicación, tenemos que ir a explicar un poco más cuál es el quehacer de la biotecnología agrícola”.

“El esfuerzo del Ministerio de Agricultura y del ministro Furche, por incorporar a todos los actores involucrados en esta discusión, industria, ONG medio ambientales, agricultura familiar campesina y sobre todo, a pequeños y medianos agricultores, es muy relevante”, agregó.

El ejecutivo destacó, en todo caso que el impacto de este cuerpo legal es nulo para su actividad, porque la mayor parte la producción semillera de Monsanto tiene que ver con híbridos que no son afectos a piratería.

“Es importante recalcar que ni Monsanto, ni ninguna empresa quiere patentar especie autóctonas y que las leyes que están en discusión nada tienen que ver con ello y por eso estamos en sintonía con lo planteado por el ministro de Agricultura en orden a que es importante generar una línea de base adecuada de los recursos genéticos disponibles en el país y cómo asegurar su preservación en bancos de germoplasma gestionados por el Estado”, detalló.

Luego enfatizó que “es de toda lógica que se permita la reutilización de semillas por parte de los pequeños agricultores, entendiendo por estos todo aquel que posee 12 hectáreas de riego básico”.

“Chile está perdiendo competitividad agrícola, por menor disponibilidad de agua, alto valor de la tierra y mano de obra y debemos enfrentar esta realidad y para hacerlo, el desarrollo de tecnología agrícola es clave”, comentó Salazar.

Con todo a su juicio, “Chile es una potencia en el sentido que produce muchas semillas de muy buena calidad y es muy reconocido”.

Suben las ganancias del sector

Jose Ignacio Salazar también destacó que la industria semillera alcanzó US$ 651 millones de dólares exportados en 2013, lo que representó un aumento de 25% respecto a 2012, el sector ocupa el tercer lugar de las exportaciones agropecuarias de Chile. Hace sólo diez años, las exportaciones de este sector alcanzaron sólo los 137,7 millones de dólares.

Este escenario de alza tendrá un importante frenazo en 2015, debido principalmente a los excepcionales rendimientos obtenidos por los agricultores estadounidenses en la temporada que acaba de terminar, situación que generó una contracción de la demanda de granos y semillas de maíz. Salazar agregó que  este fenómeno impactará fuertemente en el empleo agrícola de las regiones Metropolitana, de O´Higgins y El Maule.