Los contratiempos de la gestión Tohá en Santiago

La primera semana de diciembre se cumplen dos años desde que Carolina Tohá (PPD) se instaló en la municipalidad de Santiago. Los casi 24 meses que lleva al mando del municipio han sido de dulce y agraz, aunque en los últimos meses se han potenciado casi solo malos momentos para la alcaldesa.

El retraso en la entrega de la remodelación de la Plaza de Armas fue el primer golpe. Su reinauguración debió ser a mitad de año, pero la empresa ACA Consultoría de Proyectos -a quien se entregó sin licitación pública, sino que por trato directo- no cumplió. Se extendió el plazo a octubre, pero hoy las obras “se supone“, explica el concejal RN Felipe Alessandri– que continúan en ejecución.

“Uno mira por la ventana del municipio hacia la plaza y no ve a nadie trabajando”, dice el concejal RN. En la municipalidad han asegurado que a fines de noviembre estará habilitada nuevamente.

A esa polémica y a otras como las tomas de los colegios, principalmente el Instituto Nacional, se sumaron otros episodios cuestionados desde el concejo municipal: la consulta ciudadana. Entre las seis medidas que el municipio dispuso a votación de los vecinos se encontraban dos más polémicas: la idea de cerrar las botillerías de toda la comuna a las 23 horas y cambiar el nombre del cerro Santa Lucía por Cerro Welén, su nombre originario.

Ambas fueron rechazadas por la ciudadanía, golpe duro a la visión política que la alcaldesa había tratado de instaurar vía participación ciudadana. Alessandri critica que Tohá “corrió sola y llegó segunda” en la encuesta ciudadana, ya que no se aprobaron las posturas que ella había impulsado.

“No están siendo muy serios en el municipio. Quieren mantener una ideología, que se nota en varias medidas absurdas, en una consulta con preguntas que no están en sintonía con los vecinos y algunas, como la que modificaba el horario de las botillerías, que están al borde de la ilegalidad”, dice Carolina Lavín, concejala UDI del municipio.

Pero en el Concejo las opiniones son encontradas. Si en la oposición califican la gestión como “deficiente”, en el oficialismo del municipio solo la aplauden, aunque a regañadientes cuestionan algunas medidas. “Ha sido una muy buena gestión pensando en lo grande que es el municipio y donde se ha instaurado una mirada desde la participación ciudadana. Claro que también hay cosas que han avanzado rápido y otras que no tanto, que es posible corregir”, dice el concejal Pedro García (DC)

Misma visión tiene Alfredo Morgado (PPD, al igual que Tohá): “Yo no veo aspectos negativos en esta gestión. Carolina Tohá es muy receptiva a la críticas, a las sugerencias, tanto del concejo como de la gente, por lo tanto, se ha logrado avanzar sin problemas mayores”.

“Politización”

Los concejales de derecha critican que el ambiente se ha politizado. Alessandri dice que en ninguna otra gestión se había contratado a tantos funcionarios nuevos, sobre todo en jefaturas, y que muchos de esos cargos son ocupados por “operadores políticos del PPD”.

El concejal RN ejemplifica con Óscar Santelices, secretario general del partido de Tohá, quien ocupa funciones de asesor de turismo en el municipio por un sueldo de $2.444.444, con contrato hasta fines de este año. “Nadie lo ha visto un día trabajando en el municipio”, cuestiona Alessandri. Y agrega: “Nunca había habido tanta contratación política en esta comuna”.

Los mismos concejales -Alessandri y Lavín- critican que los cargos directivos han tenido una alta rotación por distintos motivos. 4 directores de la oficina de Seguridad Ciudadana y 3 directores de Educación en dos años. “Una de las directoras de Educación (Nancy Luco) estuvo 21 días y la alcaldesa la sacó de su puesto solo por tincada”, dice el RN.

Desde la municipalidad explicaron a través de un comunicado que “la renuncia de Luco fue solicitada por la edil debido a la pérdida de confianza en el desempeño de su cargo”, en un puesto que había sido seleccionado vía Alta Administración Pública.

Tanto en el oficialismo como en la oposición del municipio coinciden en que ha habido una mala coordinación entre los equipos que ha significado que se aprueben medidas de ese tipo o se ejecuten obras de las que después deben desistir. En parte, eso se ha relacionado con que varios colaboradores cercanos de Tohá fueron llamados por el Gobierno para asumir importantes cargos en la nueva administración.

Por ejemplo, Antonio Frey fue director de Seguridad Vecinal y hoy es subsecretario de Seguridad Pública; otros como María Inés de Ferrari, que lideraba la subdirección de Participación Ciudadana, y Josefina Guzmán, ex administradora municipal, pasaron al gobierno a distintos cargos.

La cuestionada gestión

Los cuestionamientos a la gestión apuntaron también al Parque Forestal y la “Feria de las pulgas” de los domingos, debido a que vecinos denunciaron “externalidades negativas” relacionadas al movimiento nocturno. Carolina Tohá elaboró una minuta con el reglamento para éstas, que establecía un sector como único lugar habilitado para esta actividad y con un horario restringido. Pero no se ha cumplido.

Los “pulgueros” continúan instalándose cada domingo en varias zonas del parque, por lo que desde ahora la alcaldía dejó el tema en manos de Carabineros. “Se lavaron las manos con la policía no más”, dice Alessandri. Pedro García no coincide en ese análisis: “Hay muchos cambios que se han hecho que son culturales y a veces cuesta que sean bien recibidos. Los primeros años son para sembrar y luego para cosechar”.

Días atrás, una nueva polémica golpeó al municipio. Desde sus oficinas emanó una ordenanza nueva para la Plaza de Armas que incluía una prohibición para la mendicidad, que de alguna forma obligaría a los guardias municipales y a carabineros a tomar esa decisión a conciencia, lo que generó muchos cuestionamientos. La alcaldía debió rectificar que esa idea no será instaurada.

Alfredo Morgado dice que el sello de la alcaldesa ha sido el ciudadano, por lo que una consulta sobre “temas importantes para la gente” era algo crucial para su gestión y que ha actuado en gran parte basándose en ello. “Hay una decisión muy fuerte de mejorar los espacios públicos, donde los ciudadanos tengan opinión y elijan en qué invertir dentro de una gama de opciones”, dice Morgado.

Hace una semana, el municipio celebró el Día del Funcionario con varias actividades en el Teatro Municipal. Los funcionarios fueron críticos, relata el concejal RN y se lo hicieron saber a la alcaldesa en un acalorado discurso donde los llamaron “las aves de la paz”, en modo de crítica. “Se han farreado dos años absolutamente. Los funcionarios de la municipalidad quieren que puro se vaya”, dice Alessandri.

Las próximas semanas del municipio serán clave. A fines del año pasado, los vecinos comenzaron a cuestionar la forma en cómo estaba operando el retiro de basura desde los hogares. Desde el municipio corrigieron gran parte de lo errores, pero faltaba la renovación completa de los camiones recolectores, lo que terminará su proceso en las próximas semanas. Algunos de los nuevos vehículos ya se encuentran en poder del municipio, pero la mayoría de ellos llegará en las próximas semanas.

En esa línea, el municipio iniciará una repavimentación de las veredas de varias calles de la comuna, “una deuda histórica de la autoridad comunal con los vecinos, que se realizará con fondos regionales pero gestionado por la alcaldesa” dice Morgado. Además, comenzarán a realizarse mejoras al Cerro Santa Lucía.