Ley de Biodiversidad y Áreas Protegidas está más cerca de ser aprobada
La norma dependerá del Ministerio de Medio Ambiente y su misión será resguardar ecosistemas y especies únicas del país.
Luego de casi 3 años de discusión parlamentaria, este martes la Comisión de Medio Ambiente y Bienes Nacionales del Senado aprobó la idea de legislar sobre el proyecto de ley que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP) y el Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP).
La nueva legislación marca un hito para la conservación del patrimonio natural chileno, al establecer una institucionalidad que extiende sus facultades más allá del 20% resguardado por el Estado (14,5 millones de hectáreas), abarcando zonas que no están catalogadas como áreas protegidas (AP) y que constituyen la mayor parte del territorio nacional.
El proyecto de ley se enmarca dentro de los compromisos adquiridos por Chile al momento de ingresar a la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) en 2010, considerando que somos uno de los 10 países que menos invierte en el cuidado de sus áreas protegidas. El gasto por hectárea es de 60 centavos de dólar, al mismo nivel que Irak y muy lejos de los 16,5 dólares de Costa Rica.
Dentro de las responsabilidades y atribuciones del SBAP destacan la fiscalización de los proyectos de conservación, la implementación de planes de manejo, el establecimiento de políticas públicas para la protección de especies dentro y fuera de las AP, y la ejecución de estudios que permitan conocer el estado actual y futuro de la biodiversidad en Chile.
Juan Armesto, subdirector e investigador del Instituto de Ecología y Biodiversidad (IEB), afirma que la legislación en estudio es un avance significativo para la preservación de nuestra riqueza ambiental, ya que por primera vez, “incorpora atribuciones para regular el territorio fuera de las AP con el fin de resguardar la enorme biodiversidad que se concentra en zonas habitadas, degradadas y productivas del centro de Chile”.
El Dr. Pablo Marquet, investigador del IEB, destaca que el proyecto reconoce el impacto de la biodiversidad en el desarrollo del país. “Este concepto agrupa a los beneficios obtenidos gracias a la biodiversidad, como la producción de alimentos, la regulación de los ciclos de inundaciones, la prevención de enfermedades, o el proceso de polinización, entre muchos otros”, explica. Por ello, considera que “la biodiversidad es un ‘seguro de vida’ contra el cambio climático, los desastres naturales y la hambruna”.
Para preservar el valioso patrimonio biológico del país, el SBAP deberá lidiar con problemáticas medio ambientales que amenazan a muchas especies y ecosistemas naturales, tales como la introducción de especies invasoras, los cambios de uso de la tierra debido a la expansión agrícola y forestal, la fragmentación de hábitats y la extracción masiva de recursos naturales.