¿Cuánto cobraron los ex presidentes Lagos y Piñera por hablar 20 minutos en evento de la Cámara de Comercio?
Aunque en un comienzo el ex Presidente Ricardo Lagos exigió cien mil dólares por hablar 20 minutos en la Cámara de Comercio de Santiago, finalmente cobró menos de la mitad. Mismo monto que cobró el ex Presidente Piñera, luego de enterarse de la negociación de Lagos. En América Latina, ex presidentes como Alan García, Lula Da Silva o Felipe Calderón, reciben sobre los 30 millones de pesos por sus conferencias.
Fue una verdadera convención VIP. Más de ochocientas autoridades políticas, banqueros, economistas y empresarios, todos con trajes de etiqueta y sentados en un salón del Hotel W de Vitacura, esperando que empiece una charla sobre “El Chile que Queremos”. Era la celebración del 95 aniversario de la Cámara de Comercio de Santiago, que se realizó en noviembre pasado. Cerca de las 19:30 horas, entre aplausos y asediados por la prensa, entraron las dos estrellas del espectáculo: los ex Presidentes Sebastián Piñera y Ricardo Lagos.
Veinte minutos tenía cada uno para exponer. Lagos apeló a la oratoria que le dio popularidad como jefe de Estado y habló sobre “siete desafíos cruciales” para el país, hizo un chiste sobre el Transantiago -que fue respondido con carcajadas-, y llamó a la unidad política. Piñera, en tanto, ocupó Power Points, infografías, e incluso sacó de su bolsillo una cadena de oro para explicar didácticamente su visión sobre la desigualdad. Ambos fueron interrumpidos, en algunos pasajes, por aplausos espontáneos de los asistentes que admiraban sus palabras. Y ambos, para ir al evento, cobraron la misma suma de dinero: 24 millones de pesos por hablar 20 minutos.
Fuentes de la Cámara de Comercio aseguran que esa no era la cifra que los mandatarios exigieron en un comienzo. En principio, el Presidente Lagos pidió un pago de cien mil dólares (62 millones de pesos al día de hoy) para sumarse al evento, pero tras negociar con los organizadores rebajó su tarifa a menos de la mitad. Aunque dicen desconocer el monto que se cobró por este evento en particular, desde la fundación del ex Presidente, Democracia y Desarrollo, señalan que el dinero que Lagos recauda en estas charlas va directamente al financiamiento de dicha fundación.
Las mismas fuentes al interior de la Cámara de Comercio cuentan que Sebastián Piñera no tenía una tarifa establecida para dicho evento, aunque según revista Qué Pasa, el Presidente había cobrado entre 5 y 6 millones de pesos para una conferencia en el Hotel Hyatt en junio. Pero cuando supo que la Cámara de Comercio le pagaría 24 millones de pesos a Ricardo Lagos, no quiso ser menos y decidió pedir la misma suma, también para destinar el dinero a su fundación: Avanza Chile.
Los otros Presidentes de América Latina
Los ex Presidentes Lagos y Piñera no son los únicos. Una vez acabado el período presidencial, los ex mandatarios se convierten en verdaderos rockstars de las conferencias para empresas y universidades. El mismo Ricardo Lagos es uno de los más solicitados para dar charlas alrededor del mundo en representación de su fundación. Muchas de estas son gratuitas, pero en otras cobra sumas cercanas a los 25 millones de pesos.
Según consigna el diario Folha de Sao Paulo, el brasileño Lula Da Silva, por una conferencia internacional ante ejecutivos de LG Electronics, cobró 60 millones de pesos. Mientras que el mexicano Felipe Calderón, cobra 75 millones por cada presentación.
El otro ex presidente mexicano que es solicitado en el mundo de las conferencias es Vicente Fox, que recibe cerca de 50 millones de pesos por hablar a multinacionales y universidades. Y en Perú, en 2013, la prensa destacó que Alan García cobró 30 millones de pesos por una charla a la multinacional Endesa, que durante su mandato obtuvo un contrato para construir una planta de energía en la ciudad de Talara.
Precios mucho más económicos que los que cobran personalidades como Bill Clinton o Kofi Annan. Una charla de ellos puede costar hasta 250 millones de pesos por hora. Definitivamente, eso es tener el don de la palabra.