El elefante asiático se mueve hacia la extinción
La deforestación de los bosques y la caza descontrolada para vender sus dientes y colmillos, atenta contra estos paquidermos.
Por desgracia, algunos de los animales más amenazados del mundo están presentes en el continente asiático. Junto al tigre y al oso panda, el elefante asiático, está en la lista de los más amenazados.
Este animal se enfrenta día a día a riesgos que atentan la conservación de su especie en los años venideros. Tales son los peligros, que el elefante asiático está en la lista roja de Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y destaca como ‘amenazado’.
Este elefante está presente en los bosques del sur de Asia, aunque su población en cautividad, ya sea en zoológicos, parques naturales o circos, ha aumentado considerablemente en el último tiempo.
Las principales amenazas a las que se enfrenta el elefante asiático todos los días son la falta de hábitat debido al avance de la construcción y deforestación, además de los riesgo que presenta el ser humano.
En cuanto a la falta de espacios para vivir tranquilos, esto ocurre porque la deforestación de las selvas del sur de Asia avanzan fuertemente, por lo que cada vez tienen menos espacio.
El hombre, por su parte, ofrece el mayor peligro producto de la caza furtiva, que en estos momentos llega a ser indiscriminada y ha provocado una alarmante disminución de los ejemplares de este mamífero.
La caza descomunal es debido a la venta ilegal de partes del cuerpo de este animal, como son los dientes y los colmillos.
El elefante asiático (Elephas maximus) es un mamífero de gran tamaño, de hecho es el más grande Asia. Se destaca por sus largas patas, corto cuello y una estirada tropa, la cual, en ocasiones, está rodeada por dos grandes colmillos.
Este animal tiene grandes diferencias con su pariente africano siendo el asiático más pequeño, llegando a alcanzar sólo los 3,5 metros de altura. Otra gran diferencia son sus orejas, las que son bastante más chicas que las del originario de África.
Si bien estos animales suelen encontrarse en manadas, compuestas por hembras y crías, cada vez es más común verlos deambular en pequeños grupos o simplemente solos.