Este es el secreto para que la carne del salmón "de granja" sea de color salmón
Y es probablemente nadie querría comer un plato de salmón si su carne fuera gris, pero resulta que este el verdadero aspecto de los especímenes criados especialmente para el consumo.
Cuando vemos un trozo de carne de salmón ponemos atención en su particular anaranjado que hace que este sea uno de los productos del mar más apetecidos en el mundo.
Y es probablemente nadie querría comer un plato de salmón si su carne fuera gris, pero resulta que este el verdadero aspecto de los especímenes criados especialmente para el consumo. El tinte salmón llega después y en forma de cápsulas.
El único tipo de salmón cuya carne es rosa anaranjada de manera natural, es el pez capturado en su hábitat. Esto, ya que durante su ciclo de vida se alimenta principalmente de camarones, pequeños crustáceos y krill, los cuales son ricos en una sustancia llamada astaxantina. Este compuesto se acumula en los tejidos del animal y le da ese tono salmón o rosáceo.
Pero esto no ocurre con los salmones “de granja”, como explica The Atlantic, puesto que su dieta carece de crustáceos y solo se alimentan de aceite y pasta de pescados, además de almidón de maíz, grasas animales y soja transgénica. De este modo, la coloración de su carne se torna gris y el tinte salmón aparece en suplementos alimenticios.
Así, las salmoneras hacen que su producción consuma cápsulas de astaxantina, las cuales pueden venir de cáscaras pulverizadas de crustáceos o del procesamiento industrial de microalgas cultivadas.
Esto ha hecho que se genere un negocio de alimentos para salmón en cautiverio y que incluso cuenta con una carta de colores, como cuando uno va a eligir un tarro de pintura a una ferretería, para elegir el tono anaranjado con que cada empresa quiere “teñir” a sus peces.
Si bien este suplemento alimenticio hace que el valor final del pescado se encarezca hasta un 20% más, diversos estudios han demostrado que la carne de salmón gris no es atractiva comercialmente.
De este modo, en muchos países del mundo como Estados Unidos, las empresas salmoneras deben informar en las etiquetas de sus productos que se trata de un salmón “coloreado”.