La ciencia responde por qué se prefieren determinados tipos de traseros por sobre otros
Parte de los encantos de Jennifer López o de Kim Kardashian, se explicarían en un estudio que vincula la curvatura de la espalda y los instintos de procreación.
Directo y sin rodeos: la atracción de los hombres por determinados traseros tendría un origen ancestral y no la produciría esta parte del cuerpo propiamente tal, sino la curvatura de la columna.
Según un estudio publicado por Daily Mail, esto se debe a que en el pasado esta forma “curva” permitía llevar de mejor manera los embarazos, lo que hacía a las mujeres con estas características más atractivas para reproducirse.
Fue el doctor David Lewis, de la Universidad de Bilkent, quien explicó al medio inglés que la curva “les permitía a las mujeres ancestrales desplazar el centro de su masa corporal sobre sus caderas durante el embarazo, una época donde el peso pasa a centrarse de manera dramática en el centro del cuerpo”, evitando así lesiones y fatiga muscular.
El estudio realizado por la Universidad de Bilikent, de Turquía, analizó las preferencias de 300 hombres, llegando a la conclusión que estos se ven atraídos por las espaldas que están curvadas a 45° desde la parte de arriba del trasero.
Durante la investigación se le mostraron a los hombres distintas siluetas, con diferentes curvaturas, las que calificaron según el nivel de atracción que les producía. Ellos, en su mayoría, indicaron su preferencia de manera “significativa” por los cuerpos que tenían un ángulo de unos 45,5°, producto del tamaño de su trasero.
Para el doctor, en realidad los hombres no se siente atraídos por el tamaño del trasero, sino que por la forma en que termina la columna, aunque también señala que necesita investigar más sobre el tema.