Corporación Chilena de la Madera: “Esta es la peor temporada de incendios de la historia”

Durante este periodo, los incendios han estado presentes en gran parte del país y la situación ha sido crítica. Un claro ejemplo, fueron las llamas que azotaron a la Reserva Nacional China Muerta, donde finalmente se consumieron más de seis mil hectáreas. Ante esto, el presidente de la Corporación Chilena de la Madera, Corma, Fernando Raga, ayer al entregar el balance de hectáreas, de propiedad de empresas forestales, que han sido consumidas por los incendios desde octubre de 2014 a la fecha, señaló que “esta temporada se ha convertido en la peor de la historia para los forestadores”.

Según datos que maneja Corma, en ese periodo se han quemado 20.000 hectáreas de empresas socias presentes en las regiones del Maule, Biobío, La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos, donde el gremio tiene presencia. Lo que equivale a un 37% más que el mismo periodo del año pasado. También aseguran que ha aumentado un 26% el número de siniestros registrados, llegando a 3.700 incendios lo que ha significado US$70 millones en pérdidas.

Para la Corporación Chilena de la Madera durante los últimos 15 años la superficie privada que se ha visto afectada por los incendios es de unas 7 mil hectáreas en promedio.

Esto se contradice con datos de Conaf, ya que para su director ejecutivo, Aarón Cavieres, las cifras no cuadran. “A nosotros nos sorprende, porque las cifras que tenemos son distintas. Nuestros registros indican que las pérdidas de plantaciones asociadas a empresas son del orden de 28 mil hectáreas en la temporada de 1998-1999; 27 mil hectáreas 2008-2009; y de 21 mil hectáreas en 2013-2014”, afirmó Cavieres, según consiga La Tercera.

Además, el  director ejecutivo de Conaf agregó que para comparar las últimas temporadas con el promedio de 15 años es relevante considerar el largo periodo de sequía.

Por otra parte, desde la industria aseguran que invierten cerca de US$50 millones al año para proteger sus 1,4 millones de hectáreas de plantaciones. Una realidad que choca con el presupuesto que maneja la Conaf, que, según el gremio, es de US$32 millones para cubrir 30 millones de hectáreas en todo el país. “Las empresas disponen de US$16,6 dólares por hectárea, mientras que el Estado cuenta con US$1,1 por hectárea, lo que consideramos que es insuficiente para cautelar el patrimonio silvestre del país”, sostuvo Raga.

Para Cavieres la diferencia entre la industria y la Corporación Nacional Forestal, es el sistema de monitoreo. “Nosotros tenemos un sistema nacional que acumula recursos para todo el país y cuando se requieren se usan. Es decir, se concentra una inversión de pesos o dólares por hectárea cuando ocurre una emergencia y eso se traduce en cientos de dólares por hectárea para esa emergencia. Se suman recursos de Interior, Onemi, brigadas del Ejército, entre otros”.