Fuego amigo en la DC: la compleja interna en el partido tras la "bajada" de Chahín por vínculo de Pizarro y SQM
La determinación de Fuad Chahín deja entrever una fisura al interior de la colectividad. Para algunos militantes el hecho de que la empresa de los hijos de Pizarro aparezcan en la lista de denunciados del SII resulta complejo y deja en entredicho la idoneidad ética de la DC ante la crisis de la política.
No hay plazo que no se cumpla. Lo que hasta ayer era un secreto a voces en los pasillos del Congreso Nacional, hoy se concretó luego que el diputado Fuad Chahín comunicara que no asumiría la primera vicepresidencia del partido en la directiva encabezada por el senador Jorge Pizarro, quien ganó las pasadas elecciones y que asumirá oficialmente el próximo lunes.
La determinación abrió una serie de declaraciones cruzadas que afectan al corazón del propio partido. Ello luego que se conociera que la empresa Ventus Consulting -de los hijos del nuevo presidente del conglomerado- está siendo investigada por el Ministerio Público en la arista SQM.
Al respecto, el diputado René Saffirio afirmó que le daba “un tremendo valor a la decisión de no formar parte de una directiva en que la cabeza está, a lo menos, cuestionada” y añadió que “eso va a generar un ruido al interior de la Democracia Cristiana que va a ser muy difícil que esta directiva pueda soslayar las eventuales vinculaciones del presidente del partido con financiamiento ilegal de campañas o evasión tributaria”. Incluso ayer, durante una reunión de la bancada DC, Saffirio entregó una carta a sus pares en la que abordaba dicho punto. “¿Cuál es la diferencia entre las explicaciones de Jorge Pizarro y las que dio, por meses, Ernesto Silva? Son idénticas. Pero Silva terminó renunciando, Pizarro termina asumiendo”, plantea la misiva.
A la crítica de Chahín, quien apuntó que no podía asumir en una directiva que “aparece con su presidente indirectamente cuestionado, aquí hay que cuidar las formas y la política”, se había adelantado semanas antes Ricardo Hormazábal, contendor de Pizarro en las elecciones DC. En esa oportunidad Hormazábal pidió al Tribunal Supremo del partido que Pizarro no asumiera la conducción de la DC mientras no hubiera un pronunciamiento oficial, petición que finalmente fue rechazada.
Ante el complejo escenario que tiene en vilo a la clase política, al interior del partido reconocen que la vinculación de la empresa de los hijos de Pizarro con la arista SQM es un tema que genera dudas y deja a la colectividad expuesta al escrutinio público. Y que de hecho hay dos tesis que se contraponen: la de bajarle el perfil y no hacer nada -postura más afín a la elite de la DC- o asumir con transparencia el tema. “Uno no deja de compartir en algo de lo que dice Fuad, pero desde el punto de vista de la DC se vienen cosas muy importantes, entonces no puedes dejar al partido en el aire, descabezada”, apuntó el diputado Pablo Lorenzini.
La defensa de la directiva
Horas después de conocer las palabras de Fuad Chahín, el propio Pizarro salió al paso y acompañado de los otros miembros de la directiva dijo que “respetamos su decisión pero no la compartimos. Las instituciones de la DC se han pronunciado, tanto el tribunal supremo como el tribunal electoral, ambos han manifestado la plena vigencia del mandato democrático recibido”. De esta forma, el senador no se refirió a la cuestionada empresa de sus dos hijos.
A la par, el diputado Matías Walker -quien integra la lista- afirmó que “lamento mucho la decisión del diputado Chahín, creo que no ha meditado suficientemente los efectos de su decisión, que genera una división cuando más se necesita unidad en los momentos difíciles”. Aunque no solo eso, el parlamentario también hizo eco de las palabras de la Presidenta y llamó a no dañar la honra de las personas y la de sus familias hasta que se demuestre lo contrario. Frase que, por estos días,se transformó en un verdadero eslogan de la clase política.