La preocupación de los asesores de la Presidenta por las posibles pifias en la ceremonia inaugural de la Copa América
La Presidenta regresó hoy de su gira por Europa. Y luego de una semana en que los políticos volvieron al banquillo de los acusados, la Mandataria asistirá esta tarde al evento deportivo. Eso sí no está contemplado que hable. Ni siquiera que la nombren. Ello con tal de evitar cualquier manifestación en contra de su presencia.
Durante su gira por Europa -de la que regresó esta mañana luego de estar más de una semana fuera del país- sus asesores comunicacionales le hicieron una sugerencia: no asistir a la ceremonia y al partido de Chile contra Ecuador. Ello para evitar las posibles pifias y manifestaciones en contra, algo que vivió su par de Brasil, Dilma Roussef, quien fue abucheada por la multitud cuando inauguró el Mundial de Fútbol el año pasado.
Desde ayer en la noche se hacía patente la amenaza, cuando #pifiaabachelet se convirtió en uno de los trending topic de Twitter. El reflejo virtual de su baja aprobación en las encuestas (26%), luego que se conocieran los polémicos casos Caval, Penta y SQM que develan el cuestionado vínculo entre dinero y política, reafirmó la postura de parte de su equipo comunicacional. Pero la Presidenta decidió no tomar en cuenta la sugerencia, debido al compromiso públicamente adquirido.
“Ésta, primero que nada, es una gran fiesta para nuestro país, es una fiesta internacional (…) Y, además, yo quiero acompañar a la selección nacional, naturalmente”, dijo Bachelet en entrevista en Cooperativa antes de partir a Europa. Es por ello que la Presidenta Bachelet estará hoy, a las 18:50 horas en el VIP del estadio para ver la obertura y posteriormente el partido desde el palco, a pesar de la preocupación de su equipo comunicacional por el posible escenario de las anunciadas pifias.
A pesar de ello, la presencia de la Mandataria en el Estadio Nacional podría pasar prácticamente desapercibida. Esto porque desde hace tres meses, Presidencia junto a la ANFP, tenían pactado cómo sería la participación de Michelle Bachelet en la ceremonia inaugural de la Copa América. En ese momento se determinó que en el evento la Presidenta no hará un discurso ni tampoco será nombrada, minimizando la posibilidad de medir, in situ, el apoyo de la ciudadanía.