Dos titanes se unen tras la huella del ahorro energético en la Patagonia
ENAP y la Universidad de Magallanes unen sus fuerzas, uno en infraestructura y el otro en investigación, y se comprometen para lograr el bienestar de la región en temas de eficiencia energética tras la firma de convenio.
Aunque su relación ha sido larga y permanente en el tiempo, Enap y la Universidad de Magallanes (Umag) por primera vez la formalizaron al firmar un convenio de colaboración que se centra en resolver temáticas de eficiencia energética en el sector industrial de la región. Su finalidad es aumentar aún más el intercambio de sus experiencias y el apoyo mutuo. Tendrá una vigencia de dos años y serán renovables por igual período, y el primer paso será la incorporación de profesionales de la Umag a las auditorías que Enap está realizando para optimizar su consumo de energía en las operaciones que ejecuta en el continente y en Tierra del Fuego.
La afinidad entre ambas instituciones es clara. Según explica Francisco Díaz, gerente de Enap Magallanes, quien fue una de las partes en la firma del convenio, “la Universidad tiene las competencias y la experiencia en temas energéticos y nosotros disponemos de la infraestructura para trabajar. Perfectamente podemos desarrollar un trabajo que resulte interesante no sólo para Enap, sino para la región, porque estamos hablando del ahorro de energía que nos beneficia a todos”.
A partir de la década de los 50, Enap está presente en Magallanes.
Su contraparte, en la Umag, el rector Juan Oyarzo, cuenta que la eficiencia energética es un área que forma parte del plan estratégico de la universidad. “Que Enap tenga una dirección tan clara hacia la energía nos da una tremenda alegría”, recalcó. El director del Centro de Estudios para los Recursos Energéticos de la universidad, Cere, Humberto Vidal, agregó que en materia energética tienen experiencia en el ámbito académico y residencial, pero que ahora tendrán la posibilidad de abodar el área industrial. “Es un gran desafío”, aclara Vidal.
El convenio, además, contempla facilitar la participación de la Universidad en actividades relacionadas con la formulación de un plan de eficiencia energética de mediano y largo plazo en base a los resultados que arrojen las auditorías, y apoyar el desarrollo de actividades de sensibilización en el ámbito de eficiencia energética, a través de charlas o talleres donde participen ambas instituciones.
